La cantautora jienense no descansa. Mientras continúa con la gira de su último álbum, Astronauta, y prepara un concierto único junto a Iván Ferreiro, Zahara ha sacado tiempo para llevar a su terreno la matemática Teoría de los cuerpos. Este es el título de su nuevo libro –el tercero en trayectoria como escritora–, un recopilatorio de poemas, semaforismos y relatos breves que publica tras la buena acogida de su primera novela, Trabajo, piso, pareja. «Yo no quería hacer esto, no es un género que consuma ni me creo poeta, simplemente tenía el impulso de escribir pero no tenía tiempo ni ideas para desarrollar novela», nos cuenta. «Así que, en lugar de desechar lo que me venía a la cabeza, lo he ido guardando, puliendo y dando forma, hasta que he tenido una cantidad que me parecía interesante».
Es así como surge este poemario en donde la cantante ahonda en la superficie más sensible y carnal de las relaciones humanas. «Este es un regalo que me he hecho a mí misma, porque los textos cuentan una etapa de mi vida, y al igual que mis canciones, tienen relación con cómo somos y nos relacionamos».
Acostumbrada a componer temas que ya forman parte de la banda sonora de una generación, como Con las ganas u Hoy la bestia cena en casa, resulta curioso averiguar cómo identifica, a la hora de escribir, qué será una canción y qué un poema. «Yo nunca decido nada, escribo y luego veo si la canción está ahí o es un poema o un texto que no vale una mierda. Me paso todo el día escribiendo y lo hago en bruto, sin una forma concreta», explica. «Hay muchos textos en Teoría de los cuerpos que fueron canciones, y otros que lo serán algún día».
Toda una puerta al característico universo de Zahara que, para todos aquellos que no sacan tiempo para leer, también se ha publicado en formato audiolibro. «Es el momento de los audiolibros. Yo alucino porque nunca los he consumido, pero ahora se lleva mucho. La gente va al gimnasio y se lo pone. Estamos en la época de los podcasts y los audiolibros».