Está en plena celebración de sus 25 años de carrera Mónica Naranjo, que acaba de lanzar su recopilación de grandes éxitos Renaissance. El pistoletazo de salida de su publicación lo vivimos ayer junto a ella en La Cocina de San Antón de Madrid, punto de partida de la denominada La noche de Mónica, que contagió a toda Chueca de la ‘monicamanía’.
Naranjo quiso estar presente en la inauguración de una exposición con alguna de sus fotos más icónicas, muchas de ellas publicadas en Shangay, a las que ella ha querido añadir algunos de los vestidos que utilizó en la era Tarántula. “Todavía me los puedo poner, mantengo la talla”, dijo para romper el hielo, entre risas. Mónica aseguró sentirse en casa, no imaginaba lugar mejor para celebrar que Renaissance ya es una realidad. Un box set que recopila toda su discografía hasta el momento, y que le ha hecho darse cuenta de todo el bagaje que ya tiene detrás.
Mira hacia el futuro, porque ya tiene nuevos proyectos musicales listos para lanzar en breve, y se emociona al ver el amor recíproco entre su público LGTBI –el que siempre ha estado ahí, como apuntó– y ella. Así celebra la diva lo que han supuesto estas bodas de plata, y cómo las está viviendo.