En un concurso de playback en la Universidad cristiana George Fox de Oregón (EE UU), uno de sus alumnos, Reid Arthur, interpretó la canción de Taylor Swift You Need To Calm Down y ganó por triplicado: salió del armario, ganó el premio y además logró emocionar a la propia cantante.
La canción empieza a sonar en el escenario y las luces enfocan a Arthur. Un instante después, ocho chicas lo acompañan y defienden el tema como si de una actuación en vivo de la mismísima Taylor Swift se tratara. Como broche final, sus bailarinas y él se quitaron la chaqueta para enseñar un top con flecos de los colores del arcoíris visibilizando al colectivo LGTB y alzaron unos carteles con los mensajes “Stand tall” (Ve con la cabeza alta) “Be known” (Sé conocido) y “God is love” (Dios es amor).
Los 500 dólares del premio los donó a The Trevor Project, una organización que intenta prevenir suicidios de jóvenes LGTBI. Y como el vídeo se hizo viral en Internet, Taylor Swift lo vio y decidió escribir a Arthur: “Es algo que me emocionó, estoy muy orgullosa de que mi canción haya sido una pequeña parte del viaje… Fuiste valiente y defendiste tu verdad”.
Ante la reacción de Swift, Arthur enloqueció. El universitario trató de componerse un poco antes de responder a Swift directamente, y después escribió el siguiente tuit: “Esta mujer. Mi reina. Mi icono. La mujer cuyas letras he gritado a pleno pulmón. Tú música ha sido la banda sonora de mi vida y me ha ayudado a superar momentos difíciles”. Y añadió: “¡Te quiero mucho!”.
Como consecuencia de la actuación de Reid Arthur, muchos de los estudiantes de la universidad han pedido a la dirección del centro que cambie su política oficial en contra del matrimonio gay. ¿Lo conseguirán?