Sí, has leído bien. Ver para creer. Experimentar si se puede degustar la salsa de soja metiendo los testículos en ella se ha convertido en un reto viral. Algo tan sorprendente como absurdo que los más intrépidos no han tardado en comprobar. Pero para dar constancia del experimento, qué mejor forma que grabarlo y subirlo a las redes… Ya sabéis, publicar o morir. Y la plataforma idónea es Tik Tok, la red social de vídeos musicales en alza que se ha convertido en tendencia entre los usuarios adolescentes.
Este tipo de vídeos, que destacan sobre todo por su originalidad y su humor, son susceptibles de hacerse virales, y entre sus usuarios adolescentes la competencia por mostrar el contenido más original posible está a la orden del día. Adolescentes y retos en redes…, una combinación explosiva que da como resultado grabar acciones como mojar los testículos en salsa de soja. Ridículo, pero da mucho juego para hacerse viral.
¿De dónde viene una idea tan disparatada?
De un usuario de Tik Tok que no ha dudado en poner en práctica un estudio de un grupo de científicos de Filadelfia sobre el gusto para el cual experimentaron con ratones. Este estudio se publicó en 2013, tal y como aparecía en el periódico británico Daily Mail, y al parecer la investigación se basa en que los receptores del gusto están distribuidos por todo el cuerpo del animal, y que incluso los testículos y el ano de los ratones podrían detectar el sabor dulce o salado de la salsa de soja. Resulta alucinante, sí, pero según esta teoría, en los testículos también hay papilas gustativas y podrían transmitir la sensación del sabor a la boca.
Pues bien, dicho y hecho: un adolescente ha querido comprobar si es verdad y con cámara en mano ha mojado sus testículos cual mamífero roedor en la famosa salsa. Ha subido el vídeo a Tik Tok y ya está. El vídeo se ha extendido como la pólvora y se ha hecho viral. Sorprendentemente, algo tan absurdo ha sido imitado por un montón de usuarios y ha dado como resultado vídeos randoms y graciosos. Y es que nunca podremos decir que lo hemos visto todo…