Para celebrar su cumpleaños, que fue el pasado 21 de abril, el entrenador y artista de burlesque Jake DuPree se compró lencería roja nueva. No era la primera pieza de este tipo en su colección, la ropa interior así de sexy es un elemento clave en su trabajo artístico.
«El rojo es tan fuerte y atrevido que sabía que tenía ser mío”, expresó DuPree tras publicar una pequeña sesión de fotos en Instagram probándose el conjunto de lencería. La foto fue un éxito abrumador. Tanto que la marca Playful Promises, con más de tresciento mil seguidores, también la publicó en su cuento. “¡Oh, dios mío! Jake Dupree nos hace palpitar con ese conjunto Regalia Skylar puesto”, comentaba.
Aunque la foto ha acumulado casi cincuenta mil likes, otros seguidores mostraron su disgusto: “Simplemente no. No es sexy en absoluto”, “Nunca me lo pondría porque no está hecho para que lo lleve un hombre”, decían dos de los haters más moderados. “¿No sabías que todas las prendas pueden ser usadas por cualquier género?”, respondía la marca ante el ataque de homofobia.
El joven recibía la polémica con asombro. “Ha sido abrumador. Nunca esperé recibir todo ese amor, ni tampoco todo ese odio. Intento no leer los comentarios porque me parece muy improductivo”, comentaba Dupree. “Los comentarios negativos ya no me molestan; soy muy feliz con mi vida y me siento cómodo conmigo mismo», añadía. “Creo que la foto desafía la idea de las personas sobre el género al ver a un tipo musculoso usar algo tan inherentemente femenino”.
Dupree no podía creerse que la marca de la que es tan admirador hubiera compartido su foto. “Siempre muestran diferentes tipos de cuerpos femeninos y sé que la inclusión es muy importante para la marca. Nunca los había visto publicar un cuerpo masculino usando su lencería. Es inspirador”, comentaba.
Esta publicación de DuPree forma parte de su propio –y largo– proceso de autoaceptación. Hace tres años el artista, que se identifica como género fluido, sufrió depresión tras una ruptura sentimental. El ex de DuPree le dejó cuando comenzaba a explorar su feminidad para la revista Cosmopolitan.
«Cuando mi relación y ese trabajo terminaron, sentí que las puertas para las oportunidades y la aceptación se habían cerrado», explica DuPree, quien también actuó en la final de la temporada 3 de RuPaul’s Drag Race: All Stars. «Para salir de la depresión, comencé a maquillarme y a travestirme en mi habitación. Con ayuda de terapia decidí participar en una competición amateur de drags del bar gay Revolver, en West Hollywood». De ahí dio paso al burlesque, y para prepararse se reunió con Dita Von Teese, quien le enseñó su famosa performance de la copa de martini gigante.
“Siempre se había imaginado a un hombre haciéndolo», comenta DuPree. «Lloré cuando conocí a Dita porque ha sido mi ídolo durante mucho tiempo, y ese número, en particular, me hizo querer hacer burlesque. Hice su show y comenzó mi viaje para expresarme completamente». Ahora, el bailarín ha hecho toda una carrera de aquello.
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