Los Juegos Olímpicos de Tokyo 2020 han batido el récord de representación LGTB de toda la historia. Por primera vez, la deportista transexual Laurel Hubbard ha participado en esta gran competición, y ha marcado un hito en el deporte.
Hubbard es neozelandesa y practica la halterofilia. Profundamente emocionada y preparada, cuando llegó su momento tuvo tres nulos consecutivos, por lo cual fue eliminada. A pesar del resultado final, declaró que está «profundamente agradecida» por la oportunidad de formar parte de este acontecimiento único. Además valoró al Comité Olímpico Internacional (COI) «su compromiso en demostrar que el deporte es para todos, es inclusivo y esto es fabuloso». Tras su participación, la levantadora de pesas ha anunciado su retirada profesional, pero ha recalcado la importancia de haber formado parte de estos Juegos: «Somos humanos y, como tal, espero que con solo estar aquí sea suficiente». Laurel confía en que su representación ayude a entender a la comunidad trans.
La deportista quiere que su presencia en Tokyo 2020 sea un paso más en la normalización, y afirma: «A medida que avanzamos hacia un mundo nuevo y más comprensivo, la gente empieza a darse cuenta de que las personas como yo son solo personas». Con su participación, esta mujer ha dado visibilidad a la comunidad trans y se ha convertido en todo un referente. Esperamos que Hubbard sea la avanzadilla de otros deportistas transexuales que alcancen el honor de representar a su país en el evento deportivo más prestigioso del mundo.