Tenía muchas ganas Diego Luna, según nos cuenta, de hacer teatro en España, y ha aprovechado un hueco en su apretada agenda para darse el gusto de presentar Cada vez nos despedimos mejor en Madrid.
Actor, director y productor, Diego Luna no sabe estarse quieto. Y cuando está dando los últimos retoques a la esperadísima serie Andor, que seguro hará las delicias de los fans de Star Wars a partir del 31 de agosto en Disney+, se ha permitido el lujo de disfrutar de Madrid unas semanas y también de hacerlo interpretando Cada vez nos despedimos mejor en Naves del Español en Matadero.
SHANGAY ⇒ ¿Cómo vives esta primera vez?
DIEGO LUNA ⇒ Estoy muy emocionado de hacer teatro por primera vez en España; llevaba mucho tiempo deseándolo. Crecí viendo mucho teatro aquí, y mucho teatro español en México. Mi papá viajaba mucho con la Compañía Nacional de Teatro de México, y casi todos los años traían un montaje aquí; yo le acompañé varias veces, y aprovechaba para ver funciones.
Antes había un intercambio muy abierto entre el teatro español y el mexicano, que de repente frenó en los dosmiles y se perdió. Que el Teatro Español me haya dado esta oportunidad me hace muy feliz, porque este proyecto lo creamos con la idea de que pudiera viajar.
«Tu sensación de vulnerabilidad es la que hace que el teatro sea único cada día»
SHANGAY ⇒ ¿Cómo defines Cada vez nos despedimos mejor?
DIEGO LUNA ⇒ Es una historia de amor y de despedidas, en un tono universal, por lo que creo que resultará muy interesante al público de aquí. Habla de cómo nadie nos enseña a despedirnos; la única certeza cuando nos enamoramos es que el amor se acaba, pero nunca estamos preparados para ello y entonces sale lo peor de nosotros. Y también cuenta una parte de la historia de México a través de eventos que nos marcaron, y que son conocidos. No con un espíritu histórico ni didáctico, solo es el contexto de estos personajes. La obra es un bonito viaje por el país en que crecí.
SHANGAY ⇒ Además, te estrenas en Madrid con un monólogo…
DIEGO LUNA ⇒ Es muy interesante. Vengo con la tranquilidad de que ya lo he hecho antes, no solo en la Ciudad de México sino por América Latina también. Pero siempre tienes esa sensación de vulnerabilidad que hace que el teatro sea único, porque todo puede salir mal. Aunque también es verdad que todo puede salir muy hermoso, y esta obra es lo que tiende a provocar.
SHANGAY ⇒ ¿Cómo has encontrado un hueco en tu agenda para hacer una minitemporada en Madrid?
DIEGO LUNA ⇒ Para mí el teatro es un espacio que te abres en tu vida, y que se vuelve sedentario. Sabes que todas las tardes tienes función y todas las noches vas a dormir en la misma cama. Esa rutina me resulta hermosísima. Por eso procuro hacer una obra de teatro cada dos años en México, para volver a casa si estoy trabajando fuera. Ahora me pasa aquí. Tengo que ir a Londres regularmente, porque todavía estamos trabajando en la serie, y también a México; pero al menos puedo hacer esta pausa en Madrid.
«En mi vida estoy abierto a recibir y dar amor sin andar catalogando a todo el mundo»
SHANGAY ⇒ Actúas, diriges, produces, alternas proyectos muy grandes con otros pequeños… ¿Cómo te organizas?
DIEGO LUNA ⇒ Trato de transitar entre todo lo que me gusta sin estancarme en nada. Dirigir es lo más difícil de compaginar, solo puedo hacerlo con mi paternidad [risas]. Actuar en una serie, por ejemplo, te demanda mucho durante un tiempo pero también te da espacio para estar pensando, leyendo y escribiendo un proyecto. El teatro también te deja margen, y además la pandemia nos enseñó a trabajar desde donde sea. Lo único que tengo claro es que quiero estar cerca de mis hijos, que tienen 13 y 11 años, y eso es lo que realmente define mi agenda.
SHANGAY ⇒ ¿Cómo viviste que fuesen tus hijos los que te pidieron que aprendieses a utilizar los pronombres neutros?
DIEGO LUNA ⇒ Muy bien, porque para elles es importante. Mi hija estaba muy centrada en esa reflexión, y yo ya había hecho una serie en que los personajes utilizaban el lenguaje inclusivo no binario, titulada Todo va a estar bien. Hacer ese ejercicio me llevó a hacerlo también en mi vida personal, y lo he ido incorporando poco a poco. No es fácil, pero me parecía importante hacer el esfuerzo de reconocer que las cosas están cambiando, y el lenguaje tiene que transformarse también.
En un capítulo de la serie Pan y circo que se estrena ya [el 24 de junio en Prime Video] entrevisté a [la filóloga] Lola Pons y me gustó mucho lo que dijo: «El lenguaje es tuyo, te pertenece». Para mi hija es muy fácil decir que tiene amigues, y yo, a pesar de los errores que cometo, también lo hago. Tenemos que ser sensibles a los cambios y a los pequeños triunfos que representan. Estamos aquí juntes y si algo así es importante para gente que tienes cerca, hay que darle espacio. Y para mí, mis hijes son la clave para tener claro que es importante para mí.
SHANGAY ⇒ ¿Cómo ha sido tu relación con la comunidad LGTBIQ+ hasta hoy?
DIEGO LUNA ⇒ Siento que muy afortunada y abierta. He sentido siempre una expectativa por lo que hago muy chingona, que siempre agradezco. ¡Es que yo no separo las cosas así! Me gusta contar historias humanas, y ahí cabemos todes. Para mí, haber hecho Abel, película que dirigí, Milk o Y tu mamá también es lo mismo. Cada personaje tiene su contexto, y trato de ser consciente en todo momento de la diversidad que tanto nos enriquece, y de celebrarla; pero yo me acerco de la misma manera a todos ellos cuando trabajo. En mi vida, igual, estoy abierto a todo tipo de encuentros significativos, y a recibir y dar amor sin andar catalogando al mundo.
«El lenguaje inclusivo no binario lo he ido incorporando poco a poco, aunque cometa errores»
SHANGAY ⇒ No es una actitud predominante en según qué personas…
DIEGO LUNA ⇒ Claro que no. Por eso hay hablar de ello y enfatizar lo que uno cree. Cuando cuento historias trato que nos incluyan a todes, desde una perspectiva positiva y enriquecedora, esa tan alucinante que nos define hoy.
SHANGAY ⇒ Curioso cómo puedes estrenar casi a la vez un proyecto digamos pequeño, como es Cada vez nos despedimos mejor, y uno monumental en cuanto a alcance, que será la serie Andor…
DIEGO LUNA ⇒ Pues sí. Es que la comodidad no es buena compañera de la búsqueda artística. Siempre he pensado que cuando llegas a un lugar hay que pensar inmediatamente en moverse hacia otro, porque eso te mantiene alerta y vivo, y te da la capacidad de no pasarte la vida contando la misma historia. Después de pasarme nueve meses filmando en Londres la serie Andor, nada más hermoso que reunirme en el teatro con personas a las que podré mirar a los ojos.
SHANGAY ⇒ ¿Cómo vives formar parte de un universo como el de Star Wars?
DIEGO LUNA ⇒ Con mucha humildad. La suerte tuvo mucho que ver con que esté ahí, y disfruto cada momento vivido. No solo protagonizo la serie, sino que también la produzco, y la comparto con gente que admiro y quiero. Vivir todo el proceso es muy emocionante, y me ayuda no volverme tan loco. No es lo mismo llegar, actuar y de pronto que te llegue mucha fama y exposición de golpe. Llevo trabajando en este proyecto tres años, y según voy digiriendo todo estoy en el teatro, que me recuerda quién soy, con qué herramientas cuento y de lo que soy y no soy capaz.
SHANGAY ⇒ Se te ve muy tranquilo para saber que en breve te volverá a juzgar en este nuevo trabajo una masa enfervorizada que sabe todo el fenómeno Star Wars…
DIEGO LUNA ⇒ [Risas] Por un lado, porque ya pasé por ello una vez [cuando participó en Rogue One: Una historia de Star Wars]. Se tiende a hablar de ese fenómeno desde un ángulo negativo, y yo no lo veo así, porque mi experiencia ha sido hiperpositiva. He recibido mucho amor, y se agradece sentir una expectativa tan brutal ante tu trabajo. Llevo toda la vida haciendo ruido para que la gente venga a ver lo que quieres enseñarle, sea una obra de teatro, una serie o una película.
Con proyectos como Andor es al revés, es cuestión de tiempo hasta que todo el mundo que la está esperando con ansia la vea. La sensación es muy rica, porque tienes la certeza de que si haces el trabajo lo mejor que puedas, va a llegar a la gente con seguridad, es una ventaja enorme. Porque a mí me sigue pasando cuando hago teatro que, aunque me digan que la sala está llena, me asomo por el telón para asegurarme de que realmente toda la gente que compró entradas ha venido [risas].
FOTOS: SALVA MUSTÉ
LA OBRA CADA VEZ NOS DESPEDIMOS MEJOR SE REPRESENTA DEL 25 DE JUNIO AL 10 DE JULIO EN LAS NAVES DEL ESPAÑOL EN MATADERO (MADRID).