Miami es una de esas ciudades que sin haberla visitado ya crees que la conoces. Te imaginas cómo pueden ser sus playas, su clima, su paisaje repleto de palmeras y sus noches de fiesta. Pero la realidad, es que para conocer Miami… hay que vivirla de verdad. Por eso, pudimos ver con nuestros propios ojos la espectacular ciudad ubicada en la costa de Florida, en Estados Unidos, y descubrir las maravillas que oculta entre sus rascacielos. Allí todo es grande y parece sacado de una película de Hollywood, un impresionante decorado cuyas gentes brillan como auténticas estrellas.
Este mes de abril se celebró el Pride de Miami Beach y tuvimos el placer de seguir de cerca los eventos con los que celebraron el Orgullo de la ciudad marítima. Lo hicimos junto a un grupo de periodistas que partimos rumbo desde diferentes destinos de todo el mundo y con los que pudimos disfrutar de toda la aventura. El Pride comenzó por todo lo grande con la visita del mismísimo Billy Porter. Activista LGTBIQ+ y ganador de un premio Emmy por la aclamada serie Pose, el artista recibió la llave de la ciudad en un acto donde recordó la necesidad de seguir luchando por nuestros derechos y celebrando el Orgullo en cualquier rincón del mundo.
Toda la ciudad se volcó con la celebración. Desde el mobiliario urbano decorado para la ocasión hasta un imponente espacio en plena playa de South Beach con numerosos puestos de comida, bebida y dos escenarios de música, en los que poder bailar toda la noche. Allí pudimos ver en directo a multitud de drag queens que se dejaron la piel al ritmo de Beyoncé, o disfrutar de las actuaciones en directo de Jojo Siwa y el propio Billy Porter, que también nos deleitó con su performance.
En Miami, parece que la fiesta no tiene fin. Y es que existen gran número de locales donde puedes estar comiendo mientras disfrutas del espectáculo de una drag queen, las cuales están muy valoradas y cotizadas en la ciudad, como en el mítico Palace, donde sus camareros también son dignos de admiración. Prepara tus dólares para lanzar unas cuantas propinas a todos aquellos que se dejen la piel con un buen split. Aunque la gran celebración llegó con el desfile de carrozas en el Ocean Drive.
Numerosos vehículos preparados para la ocasión, salieron de la playa para recorrer la vía principal de Miami Beach al ritmo de música y golpes de abanicos. La calle se llenó de transeúntes ataviados con banderas arcoíris que bailaban y gritaban a nuestro paso. Entre carroza y carroza, también pasaban varios coches en los que iban montadas las drag queens más famosas de la ciudad. Algunas de ellas habían pasado por el famosísimo programa RuPaul’s Drag Race y están consideradas auténticas estrellas.
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El Orgullo de Miami Beach se ha convertido en uno de los más especiales gracias a su maravillosa ubicación. Imagina terminar el desfile y volver a la playa, donde la música no para de sonar, con el agua muy cerca para poder darte un chapuzón y seguir con la fiesta y la reivindicación. Si el año que viene quieres empezar la temporada de Prides antes que nadie… no lo dudes y vive la experiencia en Miami.
Más allá del emocionante Pride, también pudimos disfrutar de la infinidad de oportunidades que ofrece Miami. Desde sus playas, donde destacan sus particulares puestos de socorristas, con su arena blanca y la diversidad de su público, hasta sus barrios con encanto. Como el característico Wynwood, una de las zonas más de moda de la ciudad, un auténtico museo de arte al aire libre que cuenta con numerosos murales hechos por artistas internacionales del mundo del grafiti.
Hablando de arte, si visitas Miami no pierdas la oportunidad de ver una de sus joyas mejor guardadas: la Villa Vizcaya se encuentra en la bahía Biscayne y es un palacio junto al mar, rodeado por un frondoso bosque. En su interior, además de jardines, estatuas, miradores y una colección de flora autóctona, encontrarás sus estancias con un estilo mediterráneo y neobarroco.
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Otra de las aventuras que vivimos en nuestra visita a Miami fue la excursión al Parque Estatal Oleta River. Navegamos en canoa por sus aguas y llegamos a una particular isla donde pudimos darnos un buen baño. Aunque uno de los momentos más especiales fue poder ver de cerca uno de los emblemas de la ciudad y de sus edificios más icónicos: la Casa Casuarina o, lo que es lo mismo, la mansión Versace. La villa en la que el famoso diseñador Gianni Versace vivió hasta su muerte a manos de Andrew Cunanan. Sin duda, Miami es uno de los lugares más espectaculares que hemos visitado. Su clima, sus playas, su gastronomía y sus noches de fiesta lo convierten en un destino imprescindible para cualquier viajero. Solo nos queda contar los días para poder volver.
También pudimos descansar en dos fabulosos hoteles de la costa de Florida. The Elser Hotel fue el primero de ellos, un imponente rascacielos con vistas a los edificios más impresionantes de Miami, y donde podías contemplar su espectacular amanecer. Y el Hotel Greystone, muy cerca de South Beach, con el particular estilo art decó que caracteriza a la zona.