Toñi Moreno fue la encargada de dar el pregón en la novena edición de Pride Torremolinos en la localidad malagueña. Y quiso aprovechar su discurso para sincerarse sobre cómo ha vivido su homosexualidad a lo largo de su vida, y también para mandar un mensaje contra la homofobia.
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La periodista y presentadora, que lucía un vestido inspirado en la bandera LGTBI, comenzó recordando el momento en que reconoció públicamente su orientación sexual, que fue en una entrevista con la cantante italiana Laura Pausini, hecho que marcó un antes y un después en su vida. Aunque Toñi Moreno lamentó no haberse atrevido a dar el paso antes.
Además, Moreno se emocionó bastante hablando sobre su adolescencia, de su primer beso y de cómo le robaron «un bonito recuerdo de su primera vez», por hacer lo que los demás esperaban de ella, y quiso pedir perdón por «ser la primera homófoba con ella misma».
La malagueña no se olvidó de su hija Lola, y confesó que «quiere un mundo de libertad para ella, no quiere que la miren distinto por no tener papá». Además, aseguró que hará todo lo posible para que no se sienta igual que ella, y que considera a su hija «el verdadero motor de cambio».
Moreno concluyó su discurso enviando un claro mensaje contra la homofobia, y se dirigió especialmente al Papa Francisco por su polémico comentario en el que pedía a los sacerdotes que negaran la entrada de homosexuales a los seminarios porque dentro había «demasiado mariconeo».
Finalmente, quiso enviarle un mensaje al pontífice para que entienda que las personas del colectivo LGTBI están «por todos lados y la mayoría son gente de bien». Y afirmó de una manera tajante que nunca se va a volver a sentir «pecadora por amar».