Su jitazo All About That Bass se ha convertido en un pizpireto y directo manual pop de autoayuda para las masas que te atrapa aunque no quieras.
Más complicado resulta que te parezca tan irresistiblemente adorable durante toda la duración de Title, en donde repite en exceso los patrones de su celebrado single una y otra vez: letras superpositivas, bromillas picantonas aptas para bebés y guiños constantes a las maneras doo woop de los 50 y los 60 –a veces acierta, como en Walkashame–.
Lo peor es cuando se atreve con un rollito hiphopero de pastel, como en Bang Dem Sticks, no debería, ¡no le pega ni con los estilismos!
Nota: 4,8
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