La Coordinadora Estatal de VIH y sida, CESIDA, con el apoyo de Gilead Sciences, presenta la campaña Razones, bajo el lema ‘Indetectable = Intransmisible’, para promocionar la prueba del VIH, su diagnóstico precoz y la lucha contra la serofobia, en el contexto de la Semana Europea del Test del VIH y la hepatitis y del Día Mundial del Sida, que se conmemora el 1 de diciembre.
La campaña tiene como misión incidir en la importancia de perder el miedo al diagnóstico y luchar contra el estigma asociado como elementos fundamentales para hacer frente al VIH. “Las personas en tratamiento con VIH y carga viral indetectable no transmiten el VIH por ninguna vía. Indetectable es igual a intransmisible”, afirmó Reyes Velayos, presidenta de CESIDA, durante la presentación de la misma.
Este mensaje, en el que gira la campaña Razones 2021, tiene un doble objetivo. Por un lado, fomentar que la población conozca su estado serológico en cuanto al VIH, haciéndose la prueba para evitar un diagnóstico tardío y la propagación del virus. Por otro, combatir la serofobia y el estigma social hacia las personas que viven con el VIH. En este sentido, la evidencia científica ha mostrado los beneficios que ofrece el diagnóstico y comienzo del tratamiento para la calidad de vida de los pacientes.
Con el objetivo de llegar a un público joven y usuario de redes sociales, la campaña de CESIDA cuenta con la colaboración del tiktoker Ger, la cómica y youtuber Elsa Ruiz, el actor vihsible David Sánchez, el creador de contenido y vihsible Dante Sendra y el humorista Gakian. Para viralizarla en redes sociales va acompañada del hashtag #ConstruyeTuFuturo, que apunta a la importancia de realizarte la prueba del VIH.
«Es muy importante seguir trabajando el estigma asociado al virus» (Jorge Garrido)
Al preguntar a Jorge Garrido, director ejecutivo de Apoyo Positivo, por qué siguen siendo importantes campañas como esta para luchar contra la serofobia, no duda. «¿Cuántas personas públicas conoces con VIH? ¿Políticas, cantantes, presentadores? Con esa sencilla pregunta y su respuesta inmediata, ya se muestra la importancia de seguir trabajando el estigma asociado al virus», dice. Y continúa: «Según las últimas investigaciones, la salud mental es la mayor comorbilidad de las personas con VIH, es decir, la situación de salud que más sufren junto al virus, por encima de riesgos físicos como los cardiovasculares. Esto solo se debe también a un principal motivo: el estigma«.
Va más allá Garrido: «En nuestra sociedad, la educación y la información sobre salud sexual son, en sí mismas, estigmatizadas. Se disponen recursos escasos para su atención o se intentan establecer pines parentales que bloquean la realidad y naturaleza del ser humano en el sistema educativo, obviando que esta educación permite a las personas una capacitación esencial para ser quienes son, disfrutar de su salud sexual de forma responsable y, sobre todo, no estigmatizar y vulnerar vidas de otras personas, simplemente, por ser quién son, o por su condición de salud».
Cuando se cumplen 40 años de los primeros casos diagnosticados de sida, la infección por VIH continúa siendo uno de grandes problemas de salud mundial. La crisis por el Covid-19 ha puesto en peligro los logros alcanzados en cuanto a los objetivos ONUSIDA 95-95-95: que el 95% de las personas conozcan su estado serológico; que el 95% de los diagnosticados mantenga una adherencia adecuada al tratamiento, y que el 95% consiga una carga viral indetectable, y por lo tanto intransmisible, además de alcanzar una buena calidad de vida.
«La imagen que muchos tienen del VIH está anclada en los primeros años de la pandemia» (Jorge Garrido)
Gracias a los avances en los tratamientos antirretrovirales de los últimos años, la infección por VIH ha pasado de ser una enfermedad potencialmente mortal para convertirse en una patología crónica y manejable. Sin embargo, en España la tasa de diagnóstico tardío sigue siendo elevada, lo que supone una importante barrera para frenar la transmisión del VIH.
Sin embargo, Jorge Garrido apunta: «La imagen que muchas personas todavía tienen del VIH está anclada en los primeros años de la pandemia. Conectada a falsas creencias y muy vinculada a la culpa y al miedo. Y recordemos que el estigma hacia las personas con VIH fue algo construido, algo intencionado, un miedo irracional ante un virus, alimentado por determinados países y responsables políticos». Por eso considera que seguimos necesitando campañas y proyectos educativos y formativos, «para mostrar tanto la evidencia científica actual del virus, que es completamente diferente a la de los años de inicio de la pandemia, como para rectificar y hacer más justa, y sencilla, la vida a las personas y comunidades afectadas».
La doctora Julia del Amo, directora de la división de VIH, ITS, hepatitis víricas y tuberculosis del Ministerio de Sanidad señala que la situación epidemiológica en nuestro país en 2021 “es claramente mejorable”. Además, explica que “tenemos unas tasas de diagnóstico tardío muy altas, cerca del 45% y nos preocupa que estas cifras no se han reducido de forma sustancial en los últimos años. La promoción de la prueba del VIH es fundamental. Conseguir esto, es ya una iniciativa de salud pública, en la que todas las administraciones, las entidades públicas y privadas, las entidades municipales y todos como sociedad tenemos que contribuir, facilitando el diagnóstico precoz de la infección por el VIH”.
Por su parte, la doctora María Jesús Pérez Elías, jefa de sección en el Servicio de Enfermedades Infecciosas en el Hospital Ramón y Cajal de Madrid, comparte que “en la consulta de VIH escuchamos los problemas de estigma de la misma manera que otros síntomas o problemas que pueda presentar el paciente. Todo lo que esté en nuestra mano, realizar informes, hablar con la familia y allegados y ayudar a enfrentar los problemas del estigma debe ser una prioridad”. Al preguntarle por los que siente que son principales éxitos en la lucha contra esta epidemia desde una perspectiva clínica, cita varios: «Descubrir el agente causal, sus componentes y cómo entraba en nuestro organismo y dañaba nuestro sistema inmune; identificar los tratamientos que impedían que el virus se pudiera replicar; mejorar los tratamientos hasta llegar al actual paradigma 1 sola pastilla al día; desarrollar tratamientos preventivos para evitar la infección por VIH, y el desarrollo de terapias de larga duración».
«Qué importante la generosidad de tantas personas hablando de su infección para ayudar a otras» (Jorge Garrido)
Sigue siendo muy importante recordar a la población la importancia de un diagnóstico temprano, afirma la doctora Pérez Elías, «porque sin él todos los beneficios del tratamiento antirretroviral se pierden, y tendremos en las personas con diagnóstico tardío, más mortalidad, más infecciones, más coste y uso de recursos sanitarios. Además de un mayor tiempo de posibilidad de transmisión del virus VIH de la persona con diagnóstico tardío a personas no infectadas«. Al ser una enfermedad crónica, es evidente que el diagnóstico positivo nunca se recibe con agrado, y por ello asegura la doctora que desde el primer momento se está muy pendiente de las personas a las que se les da. «Hay que apoyarles mientras se produce el proceso de adaptación», recuerda. Y añade que en determinados casos, el diagnóstico se hace aún más penoso: » así es para colectivos muy vulnerables, donde, además del VIH, se añadirán problemas socioeconómicos y afectivos muy importantes y llega a ser tan importante como para comprometer la adherencia al tratamiento y el seguimiento».
Jorge Garrido recuerda que «mientras controlamos el virus clínico cada vez más, el social campa a sus anchas provocando problemáticas en el tiempo que afectan la calidad de vida y salud mental de las personas con VIH, y de las comunidades afectadas, como la LGTBIQ. Fenómenos, por ejemplo, como el chemsex están íntimamente vinculados con la serofobia y la homofobia interiorizada, llegando a mostrar la espiral de autodestrucción a la que el estigma te puede conducir«.
No todo resulta tan negativo, por suerte, según declara Garrido. «Hay que destacar el enorme esfuerzo comunitario internacional y nacional por evitar que el estigma crezca e ir cambiando muchas creencias a lo largo de estos años, a pesar de tener el viento en contra e insuficiente apoyo institucional. 40 años son muchas campañas y trabajo al lado de las personas afectadas». Sin olvidarse, obviamente, «del ejercicio de valentía y generosidad que muchas personas han hecho en estos 40 años, a pesar del estigma, hablando de su infección, de VIH, para ayudarse y ayudar a otras».
«Es muy importante recordar la importancia de un diagnóstico temprano» (doctora Pérez Elías)
Desde CESIDA recuerdan que el Día Mundial del Sida es un momento para revisar y valorar qué debemos hacer para acabar con la epidemia del VIH, y tomar medidas para afrontar la discriminación que esta infección conlleva y que condiciona la vida de millones de personas en el mundo. Para afrontar esta discriminación, las principales ciudades de España vienen firmando la Declaración de París y adhiriéndose al Proyecto Fast-Track ‘Ciudades libres de VIH’, con el que se comprometen a adoptar una serie de medidas para acelerar la respuesta al VIH. La última ciudad española en sumarse a este compromiso ha sido Alcorcón. Su alcaldesa, Natalia de Andrés, ha manifestado que «juntos somos más fuertes”.
La doctora Pérez Elías explica que es lo básico que se puede hacer para mejorar la atención y la calidad de vida a las personas que viven con VIH. «Hay que educar a todo el personal tanto sanitario tanto médico sobre la importancia y el impacto negativo que puede tener en la adherencia y el seguimiento de los pacientes el trato sanitario, y resolver sus problemas biopsicosociales». Y continúa: «Sabemos que la depresión no corregida genera más fracaso virológico, y lo mismo sucede con el uso abusivo de alcohol y otras sustancias. Así que hay que intentar corregir de antemano todas las barreras para realizar bien el tratamiento y el seguimiento. Para corregirlas primero hay que detectarlas. Un clima de confianza y aceptación total es esencial para llevar a cabo esta tarea«.
De ahí la importancia de iniciativas como esta, a la que Jorge Garrido anima a que se sume el mayor número de personas posible. «Es el momento de caminar juntes hacia un fin posible, y evitar así el impacto irracional de un estigma que pesa ya demasiado en la vida de muchas personas«, afirma.
La campaña Razones, además del apoyo de Gilead Sciences, cuenta con el aval de la Sociedad Española Interdisciplinaria del Sida (SEISIDA), el Grupo de Estudio de la SEIMC para promover y difundir la investigación en el ámbito del VIH (GeSIDA) y la Red Española de Investigación del SIDA (RIS). Gilead Sciences apoya esta iniciativa como parte de su compromiso de ayudar y promover todos los proyectos que sirvan para avanzar en la lucha contra el VIH, incrementar el diagnóstico y derivación lo antes posible para el cuidado y tratamiento, y aumentar la calidad de vida de estos pacientes.
Además, la compañía colabora con instituciones y organizaciones no gubernamentales para acabar con la epidemia a través de programas de diagnóstico que son importantes para conseguir disminuir la aparición de nuevas infecciones por VIH y muertes por sida, según los objetivos marcados por la ONU para 2030.
Más información sobre la Campaña Razones 2021 en el siguiente enlace: https://cesida.org/indetectable/