Espejo, el cuarto disco de Javiera Mena, supone un paso adelante para la artista chilena abiertamente lesbiana, defensora acérrima de la diversidad, no solo musical, y también de la visibilidad gay. Este álbum es un fiel reflejo de sus inquietudes en este momento de la vida, en que ha apostado tanto por evidenciar su pasión tanto por el desenfreno del baile como por los momentos de reflexión.
Está muy conectada con su interior, como evidencia Espejo, y se nota. «Es muy complicado vivir en la mentira», explica cuando habla de ser una mujer abiertamente homosexual en la industria musical. Se considera cantante pero también productora, ya que ella participa en la producción de sus propios discos. Y lo tiene claro cuando se le pregunta por los hombres que colaboran en su álbum: «En las ciencias hay muchos más hombres que chicas…, y la música es pura ciencia. Es como está armada la sociedad». Ella está buscando productoras femeninas con las que colaborar, y nos confiesa que ya ha encontrado una en Brasil.
En esta ocasión, le hemos propuesto además un juego, para conocer mejor sus gustos. ¿Se queda con J Balvin o con Maluma? ¿Con La Prohibida o con Li Saumet de Bomba Estéreo? Aquí tienes sus respuestas.