Tailandia, con incontables experiencias inolvidables para el turista LGTBIQ+

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Bangkok es sin duda la capital más acogedora para el colectivo LGTBIQ+ de Asia. El eslogan “Mai Pen Rai” (en tailandés, “sin preocupaciones”) define la amabilidad y la mentalidad abierta de todos los habitantes de Tailandia y, a pesar de que Bangkok es una gran metrópolis, esta cultura acogedora de vivir y dejar vivir prospera aquí.

¿Quizá te preguntas si hay vida nocturna gay en Chiang Mai? Pues sí que la hay. Puede que la capital de la cultura tailandesa no compita todavía con la legendaria escena de fiestas LGTBIQ+ de Bangkok, pero los turistas todavía tienen unos cuantos lugares acogedores que visitar, y conocer de paso a la comunidad local.

La vida LGBTIQ+ en Chiang Mai no solo implica visitar bares y discotecas; el acogedor ambiente de la ciudad, y su tamaño comparativamente pequeño, hacen que la experiencia de la fiesta LGTBIQ+ resulte más fácil y cómoda que en la capital.

Phuket es el destino de playa más popular de Tailandia, no solo por sus espectaculares paisajes, sus lujosos resorts de diseño, sus impresionantes atardeceres tropicales y el cálido azul del mar de Andamán, sino también por la vibrante vida nocturna de la playa de Patong. La isla está unida al continente por dos puentes, por lo que se puede llegar tanto en avión como en coche.

Krabi es un destino de playa fácilmente accesible y posiblemente el más idílico de Tailandia, situado en el extremo suroeste a lo largo del mar de Andamán. Es aquí donde se encuentran las imponentes formaciones de piedra caliza listas para las postales a lo largo de la playa, creadas por miles de años de geografía.

Samui es ideal para que las parejas y las familias modernas se den un capricho y comprendan el verdadero significado de unas vacaciones. A los visitantes se les anima a mimarse en los balnearios de la isla, dar largos paseos por la playa, descansar en la piscina y disfrutar de una atmósfera de relajación, acompañada de buena comida.

La comida y la bebida en Koh Samui nunca son aburridas, con un sinfín de magníficos restaurantes y bares entre los que elegir. Desayunos, brunchs, cenas o lo que sea, hay una gran oferta gastronómica, desde lo más local a lo internacional. A los amantes de la vida nocturna les encantará la fantástica escena de bares y clubes de la carretera de la playa de Chaweng.

 

Vastas zonas de Tailandia permanecen fuera de los caminos trillados en Tailandia, y los viajeros suelen optar por los destinos más conocidos. Pero existe otra cara de Tailandia que espera ser descubierta, y no hace falta ser el viajero más aventurero para hacerlo: estos lugares menos conocidos son ahora más accesibles que nunca.

Lo fundamental es acudir sin prejuicios y con muchas ganas de dejarse sorprender, porque más allá de lo que imaginamos, Tailandia tiene mucho más que ofrecer al turista del colectivo dispuesto a acumular vivencias únicas.