Es un fotógrafo con una gran carrera internacional, sobre todo en Berlín. El mexicano Manuel Moncayo ha hecho de los hombres desnudos en la naturaleza su fuente de inspiración. Comenzó en el mundo de la fotografía en 2011, y el homoerotismo es su seña de identidad.
Comenzó de manera amateur con una cámara semiprofesional, y hoy su obra tiene ya un recorrido más que prometedor.
En el siglo XXI, el respeto a la naturaleza es una de nuestras asignaturas pendientes. El homoerotismo en el arte queer evoluciona según los gustos y las necesidades de cada momento, y su fin es remover conciencias para luchar con el compromiso que la sociedad establecida se niega a reconocer.
El compromiso de hoy no tiene nada que ver con el compromiso queer de los setenta. Hoy todos miramos al planeta. El arte queer, también.