Måns Zelmerlöw: “No soy homófobo”

Chaqueta ELEVEN PARIS Pantalón ANTONY MORATO Se lo toma todo con una tranquilidad pasmosa. Nos encontramos en la puerta del hotel en donde se hospeda en Madrid y no son pocos los que le reconocen y quieren hacerse fotos con él. Pone su mejor cara con todos y cada uno de sus fans. A la […]

Agustín Gómez Cascales

Agustín Gómez Cascales

He viajado en limusina con Mariah, he tomado el té con Beyoncé, he salido de fiesta con J.Lo y he pinchado con RuPaul. ¿Qué será lo próximo?

2 julio, 2015
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Måns Zelmerlöw: “No soy homófobo”
Chaqueta ELEVEN PARIS
Pantalón ANTONY MORATO

Se lo toma todo con una tranquilidad pasmosa. Nos encontramos en la puerta del hotel en donde se hospeda en Madrid y no son pocos los que le reconocen y quieren hacerse fotos con él. Pone su mejor cara con todos y cada uno de sus fans. A la hora de protagonizar este reportaje, su única petición es una copa de vino blanco, que bebe a pequeños sorbos mientras disfruta de las vistas de la terraza que convertimos en centro de operaciones, charlamos y posa. Ni un mal gesto ni agobios, dispuesto a todo con la mejor de las disposiciones, muy tranquilo. Así se le vio también en la final de Eurovisión en la que arrasó, en ningún momento le traicionaron los nervios y eso contribuyó a que lograse el triunfo para Suecia, que el año que viene organizará Eurovisión –en Estocolmo–. “No podía permitir que me traicionaran los nervios, estuve muy centrado. Mi sueño fue siempre convertirme en atleta, y creo que ha influido en mi manera de enfrentarme a los retos de mi profesión”.


«CADA VEZ SON MÁS LOS QUE ACEPTAN EUROVISIÓN COMO UNA BUENA FACTORÍA POP»


Måns Zelmerlöw dio prioridad a su pasión por la música frente al deporte, y no le ha ido nada mal. Toda una celebridad en Suecia, allí compagina su carrera de cantante con la de presentador televisivo. Perseverante, a la tercera ha logrado representar a su país en Eurovisión, tras dos intentos previos fallidos. “Espero que sea el inicio de algo grande. Llevaba cuatro años presentado un programa, y todo el mundo me decía que estaba loco por volver a la música, que no me iba a salir bien, que me centrara en la televisión. Me dejé llevar por mis tripas, por las ganas de centrarme en el arte. No he podido tener un retorno mejor a la música”.

 

Más allá de Heroes, la canción australiana era su favorita del festival (“el cantante es estupendo”), pero le pareció que la puesta en escena fue demasiado lineal. Con Edurne se le cae la baba. “Es tan hermosa”. Lo repite en varias ocasiones. Incluso ojeando la edición previa de Shangay en donde la entrevistamos se le vuelve a escapar. Le gusta físicamente, y no lo oculta. “Tiene mucho talento”, añade, probablemente para rebajar un poco el tono de sus elogios y que no se le note tanto que se le cae la baba con ella –no funciona–. “Y creo que tendría que haber quedado mejor situada en la final”. Aunque lo cierto es que no sabe ni remotamente en qué puesto terminamos. Al decirle que fue el 21 abre muchísimo los ojos, sorprendido. “Pues ella era buena. Aunque quizá sí la vi muy nerviosa en su actuación. La verdad es que apenas tuvimos oportunidad de hablar, solo en los ensayos”. Les unió a la hora de hablar, más que el festival, Grease. “Sabía que ella había interpretado a Sandy, yo había hecho de Danny, y lo comentamos. Pero poco más”.

Måns Zelmerlöw: “No soy homófobo”
Camiseta y pantalón DSQUARED2

¿Qué fue lo primero que hizo tras ganar Eurovisión? ¿Qué se tomó con Conchita Wurst para celebrar su triunfo? Pasa página.

No cabe duda de que Zelmerlöw, de 29 años, es muy competitivo. La primera vez que se presentó a Melodiefestivalen, donde se escoge al representante sueco, fue en 2007, y no ha parado hasta ser el elegido. Desde jovencito tuvo claro que utilizaría cualquier posible trampolín mediático para hacerse conocido, y opina que no hay otro mejor que Eurovisión. “Desde que Loreen ganó hace tres años, ha cambiado el modo en que mucha gente considera el festival. Creo que cada vez son más los que lo aceptan como una buena factoría pop”. Aunque es consciente de que ni siquiera habiendo triunfado en él lo tiene todo hecho. “He construido mi carrera hasta ahora a base de participar en concursos, sé que es doblemente complicado hacerte respetar si sales de uno. Sale tanta gente con un perfil parecido de talent shows que destacar es dificilísimo”.

Måns Zelmerlöw: “No soy homófobo”
Camiseta y pantalón DSQUARED2

Tras diez años de ‘maduración’, Måns conquistó Europa –y Australia– el pasado 23 de mayo con Heroes y una impecable actuación. Era el gran favorito para el triunfo eurovisivo y lo hizo valer. ¿Qué fue lo primero que hizo una vez terminó la retransmisión y las entrevistas posteriores? “Tomar champán y Jäggermeister con mi equipo en el camerino”. Vamos, que a partir de ese momento perdió la consciencia. Se ríe y desmiente que el Jägger bloqueara su memoria. “Me acuerdo de todo. ¿Sabes por qué? Porque, desgraciadamente, no hubo un gran fiestón después en el que perder los papeles. Yo hubiera querido terminar encima de una mesa bailando Uptown Funk completamente ido, y por más cervezas que bebí después, nada. Resulta que mi mánager me las dio sin alcohol, sin yo saberlo, pensando en la promoción del día siguiente… Cuando me lo contó me pillé un rebote importante. ¡Para una vez que gano Eurovisión!”.

Måns Zelmerlöw: “No soy homófobo”
Camiseta ANTONY MORATO
Pantalón DSQUARED2

 Coincidió casi por casualidad con Conchita Wurst, ganadora del año pasado –a la que entrevistamos poco después de su triunfo– y una de las hostess de la edición eurovisiva que él ha conquistado. Conchita se marchaba ya tras la gala final pero no se pudo resistir a la proposición que le hizo Måns: “La invité a un chupito de Jägger”. Se habían conocido unas semanas antes en Londres, y por lo visto la conexión fue inmediata. Una vez le cedió el título al sueco, Conchita no le dio ningún consejo, según cuenta este. “Me pareció que estaba muy feliz por mí”. Frente a la apuesta absoluta por un glamour más bien excesivo de Conchita, a su lado Måns parecía que pasaba por allí; su apuesta por un look muy casual llamó la atención precisamente por su contención. “Como todo el mundo se arregla tanto, pensé que destacaría si actuaba como lo hice. Hasta este momento de mi carrera siempre había actuado con trajes, vestido muy formal. Me pareció que una canción como Heroes tiene un mensaje tan potente que hablaba por sí sola, no necesitaba que lo adornara yo”.

Måns Zelmerlöw: “No soy homófobo”

Viendo la seguridad que transmitió con su actuación ganadora, cuesta creer que Måns estuviese cantando sobre lo que significa superar la intolerancia y el desprecio que se puede sufrir cuando uno es considerado diferente a los demás. Zelmerlöw cuenta que en el colegio era considerado ‘el raro’ porque tenía muchas mascotas y le encantaba cultivar tomates. “Tenía once años, y un chico de mi clase me eligió como su víctima, y hasta logró que mis amigos me dejasen de hablar. Me quedé muy solo, y empecé a avergonzarme de mí mismo. No era capaz ni de hablarlo con mis padres. Y es algo que me marcó y que me dejó huella. Procuro pasar el menos tiempo posible solo, se me hace duro”. ¿Su mejor herramienta para recuperar la autoconfianza perdida y afianzar su identidad? Efectivamente, la música.

¿Cómo justifica sus polémicas declaraciones homófobas? Pasa página.

Visto su discurso, sorprenden aún más las desafortunadas declaraciones con tintes homófobos que realizó en un reality televisivo sueco, cuando declaró que no le parecía natural que los hombres quisieran dormir con otros hombres. Lógicamente, una vez ganó Melodiefestivalen y se convirtió en el representante de su país en Eurovisión, la polémica que generaron aquellos comentarios explotó a nivel europeo. No puede negar la evidencia, porque lo que dijo está más que documentado, y asegura que le entristece mucho. “Me considero un gran amigo de la comunidad LGBTI, y siempre que puedo participo en Orgullos y galas gays. No soy homófobo, y me sentí rarísimo cuando se intentaba hacer ver que estaba del otro lado, porque no es así”.

Creía que era un capítulo olvidado, pero al convertirse en favorito para Eurovisión aquel fantasma regresó. “Pensé ‘otra vez, no, por favor’. Pero la culpa es mía y lo acepto, utilicé palabras estúpidas sin pensar lo que podían significar. Aproveché cada oportunidad que tuve antes de Eurovisión para dar todas las entrevistas posibles y explicarme a los periodistas. La homosexualidad es tan natural como la heterosexualidad, y una pareja gay pueden ser tan buenos padres como cualquier otra pareja”.

Måns Zelmerlöw: “No soy homófobo”
Camiseta ELEVEN PARIS
Jeans JUST CAVALLI

Curioso que hablara de abominación en un momento dado y asegure que es algo que jamás ha pensado. Al preguntarle si realmente se equivocó de palabras o si acaso estaba pasado por una etapa de homofobia encubierta, culpa al alcohol. “Grabábamos un show de cocina en Sicilia, y llegó un momento en que me olvidé de que había cámaras. Estábamos de cena, bebiendo mucho y ni me acuerdo de cómo surgió la conversación. Quería decir que la homosexualidad no era tan común y utilicé una palabra sueca que puede tener connotaciones negativas, aunque no lo sabía entonces, y que se puede traducir como ‘desviación’. No he dejado de disculparme desde que sucedió, y seguiré haciéndolo. Eso sí, creo que el 99% de Europa sabe ya que si algo soy es gayfriendly”.


«ME CONSIDERO UN GRAN AMIGO DE LA COMUNIDAD LGTBI. ME SENTÍ RARÍSIMO CUANDO SE INTENTABA HACER VER QUE ESTABA DEL OTRO LADO»


Cuando presentó el año pasado la gala de los Swedish Gay Awards, en la cual se paseó desnudo por los aires sobre una bola de demolición a lo Miley Cyrus en Wrecking Ball (“no sabes el daño que me hice al metérmela entre las piernas para que no se me viera”), todavía no se había emitido el programa que hizo pública su grave confusión verbal. “Canté un tema titulado Propaganda, criticando la homofobia en Rusia y defendiendo el amor gay, sobre la música de In The Navy. Un mes después, todos los que le aplaudieron en esa gala le tachaban de homófobo. “Surrealista, la verdad, aunque comprensible. Por suerte, algunos de mis mejores amigos gays son periodistas, y fueron los primeros en salir a defenderme. No justificaban lo que dije, pero sí explicaban que podré ser cualquier cosa, pero intolerante, no. ¿Tú has visto con quién viajo?”. Señala a su acompañante, suerte de asistente personal, road manager y maquillador todo en uno, evidentemente gay. “Es un capítulo triste de mi vida, pero un capítulo cerrado”.

¿Quieres saber cuáles son sus tres canciones ganadoras de Eurovisión favoritas? Pasa página.

TOP 3 EUROVISIVO DE MÅNZ ZELMERLOW

Estas son las 3 canciones ganadoras de Eurovisión favoritas del triunfador de la edición 2015 del festival.

1.    Euphoria – Loreen (2012)

2.    Fairytale – Alexander Rybak (2009)

3.    Fly on the Wings of Love – The Olsen Brothers (2000)

 


EL DISCO PERFECTLY DAMAGED ESTÁ EDITADO POR WARNER MUSIC. MÅNS ZELMERLÖW ACTÚA EL 3 DE NOVIEMBRE EN MADRID (LA RIVIERA) Y EL 4, EN BARCELONA (RAZZMATAZZ). ENTRADAS A LA VENTA EN LIVENATION.ES


Fotos Valero Rioja
Estilismo Miguel García


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