Bizet murió con 36 años pocos meses después del estreno de Carmen en la Opéra-Comique de París en 1875, que fue un fracaso estrepitoso. El compositor nunca sospechó que su ópera se convertiría en una de esas obras que ahora muchas veces, de manera tan cursi como facilona, son calificadas como ‘la ópera entre las óperas’. En su momento, Carmen fue un verdadero escándalo y, de alguna manera, lo sigue siendo, pues la obra sigue levantando pasiones.
La directora de orquesta surcoreana Eun Sun Kim –que fue la primera mujer en dirigir una ópera en el Teatro Real, cuando en 2010 estuvo al frente de El viaje a Reims de Emilio Sagi–estará en el foso. Muy vinculada a España, presume de ello sin tapujos: «Los años más importantes de mi vida los viví aquí. No solo aprendí español, sino mucho de lo que es el teatro».
Conoce muy bien esta obra de Bizet: «Es una ópera que nos habla directamente para preguntarnos quiénes somos como seres humanos. Es la primera vez que la hago con una orquesta española».

Foto del estreno londinense de esta propuesta de Damiano Michieletto de Carmen con Aigul Akhmetshina, que interpretará el mismo rol titular en el Teatro Real, en el primer reparto de la ópera. Foto: Camilla Greenwell.
Esta obra supuso un antes y un después en la concepción de la opéra-comique francesa, pues rompió con muchas de sus reglas. Por eso su fracaso en el estreno fue tan estrepitoso. Joan Matabosch asegura que «tras su estreno en Viena, donde había más libertad y menos cortapisas» se vio de otra manera. Desde ese momento hasta hoy, la obra ha sido revisada desde todos los puntos de vista. Como este que ahora llega a Madrid.
La propuesta de Damiano Michieletto –coproducida entre el Teatro Real, la Royal Ballet and Opera Covent Garden de Londres, donde se estrenó el año pasado y ya se ha repuesto, y el Teatro Alla Scala de Milán, donde se estrenará el próximo mes de junio– sitúa la acción en los años setenta del pasado siglo XX. El director italiano asegura que quiere hacer hincapié en la violencia sobre las mujeres, en una historia protagonizada por un ser tan libre y complejo como es Carmen.
También resalta la relación que hay entre esta obra de Bizet –basada en la novela Carmen de Prosper Mérimée, publicada en 1845– y la fuerza lorquiana de la figura de ‘la madre’ en obras como La casa de Bernarda Alba. En este caso, la madre de Don José, que adquiere protagonismo en esta propuesta. El poder de la mujer en un escenario «nada sofisticado para acercar el conflicto de los personajes al público». El regista italiano ya sorprendió el año pasado en este mismo escenario con su desgarradora propuesta de Madama Butterfly, con una Saioa Hernández en estado de gracia como Cio-Cio San.
Carmen es una mujer que revoluciona ese mundo cerrado en el que se cruzan pueblerinos, contrabandistas, gendarmes y toreros en un decorado giratorio que da a la ópera una lectura naturalista y psicológica, que enfrenta la sociedad opresora, machista y justiciera, reforzada, como hemos apuntado, por la presencia fantasmal de la madre dominante de Don José.

Carmen regresa al Teatro Real con varios repartos diferentes. En la foto, hecha el día de la rueda de prensa de su presentación en el Teatro Real, sentadas, J’Nai Bridges (Carmen) y Aigul Akhmetshina (Carmen). De pie, Michael Fabiano (Don José), Eun Sun Kim (directora de orquesta) y Charles Castronovo (Don José). Foto: Javier del Real.
En el plano vocal, hay tres ‘cármenes’ de las que hoy pisan los mejores teatros del mundo. Aigul Akhmetshina, que estrenó esta producción en Londres y está también en el reparto de estreno madrileño. La mezzo asegura que «es una mujer muy compleja; una mujer que quiere ser amada pero que, sin embargo, no sabe lo que es el amor. Es una obra sobre sentimientos y emociones humanas, con una música tan poderosa que cada vez que la interpreto salen nuevos colores».
J’Nai Bridges, por su parte, será el rol titular en el segundo de los repartos. «Es mi debut en Madrid. Hacer esta obra es un sueño hecho realidad. Siempre me había dicho, ‘lo habré logrado cuando haga una Carmen en España’ – nos asegura entre risas–. Es una mujer tan compleja…». Ketevan Kemoklidze dará vida a la cigarrera en el tercero de los repartos.
Fabiano: «Es la primera ópera del verismo»
Por su parte, Charles Castronovo y Michael Fabiano se alternan en el rol de Don José. Para el tenor estadounidense «Carmen es la primera ópera del verismo; descubre la vida real antes que Puccini o Mascagni. Bizet fue el primer feminista», asegura Fabiano, uno de los tenores habituales del Teatro Real en todas las temporadas.
Lucas Meachem, Luca Micheletti y Dmitry Cheblykov, serán Escamillo y Adriana González y Miren Urbieta-Vega, Micaëla. Por su parte, David Lagares (como Zuñiga), Toni Marsol (Moralès), Natalia Labourdette (Frasquita), Marie-Claude Chappuis (Mercédès), Lluís Calvet (Le Dancaïre) y Mikeldi Atxalandabaso (Le Remendado) completan el reparto.
En el 150 aniversario del estreno de Carmen, la obra que Bizet nunca vio triunfar, regresa al Teatro Real. Serán dieciséis funciones desde el 10 de diciembre hasta el 4 de enero.


