Nuestras apuestas para Eurovisión 2015

27 países están convocados a la final de Eurovisión 2015, que se celebra este sábado 23 de mayo en el Wiener Stadthalle de la capital austríaca. Como todos los años, al festival gay por excelencia le acompañan pronósticos y favoritos que hacen las delicias de las casas de apuestas y los eurofans. Vaya por delante que nada nos haría más ilusión que Edurne consiguiera traer Eurovisión a España, pero nos tememos que Amanecer cuenta con duros competidores que no se lo pondrán nada fácil a nuestra representante y el bailarín italiano Giuseppe di Bella.

Estas son las 5 apuestas de los redactores de Shangay, con porra sobre la posición que ocupará Edurne incluida:

LETONIA

“En un año en el que reinan la uniformidad y la previsibilidad hi-tech, suerte que está Letonia. El r’n’b alternativo ha llegado a Eurovisión de la mano y la voz de Aminata, exótico nombre para una ganadora improbable, pero que bien merecería alzarse con el triunfo con Love Injected. Este festival es casi siempre fiel reflejo del mundo en que vivimos, y no son las candidatas que más bien nos harían las preferidas por la mayoría. En un mundo ideal, sería estupendo celebrar el triunfo eurovisivo de Letonia, porque son los únicos que se han atrevido con una fórmula magistral, fijándose en tendencias contemporáneas que convencen por igual a la audiencia mainstream y a la hipster.

¿A quién se le habría ocurrido mandar a Eurovisión una propuesta que fusiona lo mejor de FKA twigs, Tinashe y Sia? Pues a Letonia. Y frente a la pirotecnia que impera en la puesta en escena de gran número de participantes, su sobria apuesta fascina: toda la atención se centra en la intérprete, cuyo rojo vestido tiene expresividad propia, con lo que a ella le basta con cantar como sabe y ejecutar sinuosos movimientos con los brazos. Todo suma sin necesidad de grandes alardes. Como sucede con la gran favorita, Suecia, que una vez más demuestra con actos por qué son reyes del pop. Igual que hace Australia, que se luce como invitada especial. Nada que ver con lo que proponen países como Reino Unido o Israel, tan desafortunados con sus elecciones en esta ocasión, chabacanas e innecesarias en exceso. Que el r’n’b electrónico de Letonia aporte algo de cordura en esta noche deliciosamente loca”.

Pronóstico para Edurne: 13ª posición

Agustín Gómez Cascales

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SUECIA

“Que sí, que todos los años parte como favorita, que la victoria de Loreen en 2012 fue un acto de justicia poética para con la escena nórdica y que la sombra de Abba es, además de alargada, inspiradora. Si nos olvidamos del, ejem, desliz homófobo de su representante, Måns Zelmerlöw,del que se retractó, Suecia presenta este año Heroes, un tema muy en la pauta de su compatriota Avicii y cuya puesta en escena sabe aprovechar todas las posibilidades estilísticas del escenario del Wiener Stadthalle. No será la canción más interesante –eso se lo dejo a Letonia–, pero sí la más eurovisiva. Zelmerlöw saldrá al escenario de los primeros, algo tradicionalmente considerado desfavorable, pero raro sería que el público no se quedara con su cara para las votaciones finales.

Las canciones de Australia, Bélgica, Lituania –con beso gay incluido– o Estonia también son dignas propuestas para suceder a Conchita Wurst en el trono eurovisivo. Cualquiera menos Rusia. Lo siento por la balada de Polina, pero ¿nadie ha pensado en lo inconveniente que sería para el eurofan gay celebrar Eurovisión 2016 en Moscú? No, gracias”.

Pronóstico para Edurne: 12ª posición

Pablo Giraldo

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RUSIA

“Ni el amor patrio que siento hacia Edurne, ni los músculos del chulazo sueco, ni la versión rejuvenecida de Il Divo italiano, ni la polémica canción contra la masacre otomana de armenios durante la Primera Guerra Mundial del sexteto Genealogy… A mí la que me tiene sorbido el seso desde que la escuché es A Million Voices de Polina Gagarina. Sí, sé que está feo apoyar a la candidata de un país que atenta contra los derechos de los homosexuales y que ha desplegado sus tropas en territorio ucraniano. Sin embargo, ¿y si le damos la vuelta al asunto y transformamos su canción buenrollista y fraternal en un himno gay por el respeto y la tolerancia? Si la actuación de Polina durante la primera semifinal se convirtió en una marea arcoíris, imaginaos la que se montaría si el próximo año Rusia fuera el país anfitrión. ¿No os encantaría ver el gepeto de Putin cuando todos los eurofans invadieran la ciudad armados de banderas gays? ¡A mí me apetece todo!

Asuntos políticos aparte, el tema es potente, pegadizo y tiene sonido eurovisivo. No importa que en en su primera puesta en escena su vestido luminoso no brillase tanto como el de JLo cuando interpretó Feel The Light en American Idol, era solo un adelanto. Escuchadme, Rusia va a sorprender y este gesto podría ser el principio del cambio”.

Pronóstico para Edurne: 20ª posición

Pablo Carrasco

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AUSTRALIA

“Hay que ser buenos anfitriones. Australia participará por primera vez en el Festival de Eurovisión y oye, puestos a soportar los ya históricos biscottos de los países del Este, metamos en el horno a Guy Sebastian y su Tonight Again. Solo si ganan, los oceánicos repetirán en 2016, por lo que es preciso agotar todas las naves para poder ver a Kylie subirse al escenario del evento gay por antonomasia. La canción, además, no desmerece, con ese toque brunomarsiano cuyo ritmo resulta muy difícil no acompañar con alguna parte del cuerpo. Si a ello unimos que Barcelona podría ser la sede del Festival de Eurovisión en caso de victoria australiana, no quedará más remedio que confiar en ellos por delante de Edurne. Y si necesitas más motivos de peso para apoyar a los aussies, tenemos unos cuantos aquí y aquí”.

Pronóstico para Edurne: 9ª posición

Joaquín Gasca

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ISRAEL

“Mi apuesta es para Israel porque, con tan solo 16 primaveras, Nadav Guedj nos sorprende con un tema transgresor que fusiona estilos musicales, pero que no se olvida de sus raíces judías, lección aprendida de su compatriota Offer Nissim, que siempre supo integrar estos ritmos. Golden Boy quizá no tenga la grandeza que plantea la opción letona con su Love Injected, o la fuerza vocal del tema australiano Tonight Again, pero sí tiene la frescura necesaria para alzarse con el triunfo. Una letra y unos ritmos que invitan a la fiesta, y un vídeo donde se incluyen imágenes del Gay Pride de Tel Aviv. Lo mejor, sin duda, su estribillo. A falta de poder celebrar la próxima edición en España –ojala nos equivoquemos y Edurne se alce con el testigo eurovisivo–, qué mejor opción que hacerlo en Tel Aviv, una de las ciudades más gayfriendly del mundo”.

Pronóstico para Edurne: 11ª posición

Kike Gómez