Imagínate que, tras perder la audición durante unos meses, lo primero que escuchas después de recuperarla es una propuesta de matrimonio por parte de tu novio.
Pues bien, esto no es sacado de la lista de ‘mejores formas de pedir matrimonio‘, es una historia real que ocurrió hace tan solo unos días.
Los protagonistas de nuestra historia son Kerry Kennedy y Hayward Duresseau, una pareja de Estados Unidos que tuvo que hacer frente a la meningitis bacteriana que sufre Hayward.
Durante un viaje de la pareja a San Francisco, Hayward comenzó a sentirse cansado, pero creyó que simplemente era un dolor de cabeza temporal. Aunque lo que realmente padecía era una meningitis bacteriana, una infección de las membranas protectoras que rodean el cerebro y la médula espinal.
Por suerte, llegaron a tiempo al hospital y consiguieron parar el virus, algo imprescindible para que no sea letal. Pero no pudieron evitar que Hayward sufriera patologías severas: pérdida de la visión, de la audición y parálisis de cintura para abajo.
En las siguientes semanas fue recuperando poco a poco la vista y la movilidad, pero sus oídos seguían sin funcionar. «Podía ver todo lo que estaba pasando, podía comunicarme, pero el mundo no podía comunicarse conmigo», comenta.
Durante seis meses, Hayward luchó por comunicarse con el mundo exterior. Los médicos activaron los implantes cocleares, un dispositivo electrónico para restablecer la audición. Yo primero que escuchó fue: «Entonces, ¿ te casarás conmigo?».
Emocionado, Duresseau acepta la propuesta, y la pareja se funde en un largo abrazo… ¡Cómo nos gusta dar este tipo de noticias!