Era su noche. Karina presentaba su último disco, Hello, con varios temas nuevos ( como Tú eres, Hello o Mi quimera) y sus clásicos remasterizados. La cita era en la sala Galileo Galilei (un lugar mítico en Madrid para la música en directo) con un concierto. Allí, en el escenario, rodeada de prensa –como en sus buenos tiempos, como a ella le gusta– sorprendió con un emotivo discurso en el que emocionó a todos recordando cuando en su discográfica, Hispavox, le dijeron, en 1978, que zanjaban su contrato con un lacónico y terrible «Aquí no renovamos a horteritas».
Karina ha grabado ahora “un nuevo LP” para conmemorar los 50 años de Las flechas del amor. “Las canciones, gracias a Dios, no tienen arrugas. Yo quiero mucho a mi profesión, que es muy dura, inestable. Pero es que yo también soy inestable. Por eso es muy importante luchar. Si uno tiene fe, las cosas llegan”, nos dijo en la presentación. Todo esto es posible gracias al esfuerzo de Fermín Ortiz, su productor, que se ha empeñado contra viento y marea en sacar este proyecto adelante: “Es el trabajo enorme de una estrella que siempre lo ha sido”, asegura sin embargo él.
Es todo un icono de una época, como su tema El baúl de los recuerdos. Pero ella no quiere quedarse ahí, y por eso ha decidido sacar un nuevo disco. Esta mujer –que quedó en segunda posición del Festival de Eurovisión con En un mundo nuevo– sigue teniendo energía para eso y mucho más. Por eso nos emociona lo que nos dijo sobre el escenario de la sala Galileo. También recordó cómo el programa de TVE Pasaporte a Dublín –en el que fue elegida para representarnos en el festival– fue un precursor del hoy archiconocido Operación Triunfo.
En los años previos a lo que nos cuenta en este vídeo, su entonces mánager, Emilio Santamaría, el padre de Massiel, llevó su carrera con gran éxito, sobre todo a raíz de su aparición en Escala en Hi-Fi, mítico programa de TVE. Temas como Las flechas del amor, En un mundo nuevo, La fiesta, Tú y yo, Qué más da o Muñeca de cera –la versión en español de Poupée de Cire, con el que France Galle ganó Eurovisión en 1965)– la subieron a lo más alto de las listas de ventas, que entonces eran muy altas.
A partir de ese momento, y durante décadas, la cantante no paró de cosechar éxitos y de ser una de las famosas más buscadas por las revistas. Fueron muchas las portadas que Karina copó en las principales cabeceras de este país, sobre todo a raíz de su matrimonio en 1973 con Tony Luz, uno de los músicos más representativos del pop rock de esos años.
Anoche, lunes 18 de noviembre, se puso de largo su nuevo disco, Hello. Y la noche terminó como no podía ser de otra manera, con aires de fiesta… Bravo por ella. En Shangay te queremos.