No tienen fin. Ni límites. La ultra caverna rancia está imparable y se viene arriba. Ahora atacan de nuevo a la comunidad trans (no paramos de insistir, la más desprotegida de las siglas LGTBI) con un intolerable meme que circula de WhatsApp en WhatsApp. Y ellos se creen tan graciosos.
En un momento de crispación política como el que vivimos, y en medio de una crisis sanitaria, social y económica sin precedentes por la COVID-19, ellos siguen con su enfermiza obsesión. En medio de las más que legítimas críticas a las gestiones de las diferentes administraciones de diferente signo político (no vamos a cuestionar nunca que nadie exprese su opinión, y su crítica, sea a quien sea), ellos aprovechan para hacer que ‘su’ Pisuerga pase por ‘su’ Valladolid. Están enfermos, no cabe la menor duda.
Justo cuando el debate en nuestro país es otro, debido al terrible momento que estamos viviendo, la caverna ultra intransigente vuelve contra la comunidad trans. Para ello no dudan en frivolizar con el dolor de muchas personas, que necesitan del apoyo social e institucional para algo tan simple y sencillo como el poder vivir en libertad.
Una persona trans es, vamos dejárselo muy claro a esta gente, una persona que no está conforme con el cuerpo en el que nace. Tal cual, una persona no se hace trans; nace así. Y punto. «Viví la infancia confinada en un cuerpo que no me pertenecía», dijo, rotunda, la maravillosa Bibiana Fernández el pasado mes de abril en El programa de Ana Rosa, en Telecinco, cuando le preguntaron sobre cómo había pasado los meses del confinamiento. No se puede decir más claro. Como todo en ella.
Pues ahora que muchas personas cuestionan ciertas leyes que han dado un poco de aire, de respiro, a todas esas personas que viven esa realidad –porque eso no es una broma, es una realidad–, este meme aprovecha el estado de crispación reinante para que esa caverna ultra responda con los manidos «ja, ja, ja» o emojis de risas a esta aberración.
«Me defino como ‘trans-económico’. Es decir, soy una persona con gustos de rico, pero atrapado en un cuerpo de tieso. Y obviamente exijo al Estado que me garantice mi derecho a vivir como me siento, y no como la sociedad heteropatriarcal me impone, sin discriminarme por una condición socioeconómica que yo no elegí. #YoTambiénSoyTransEconómico«. Así, sin anestesia.
Esta serie de actitudes lo que vienen a demostrar es que, quizás, esta caverna ultra sí tiene razón en una cosa. En que las leyes LGTBI en los colegios no son tan necesarias. Es más que probable que los niños que van al colegio en 2020 no piensen como ellos, porque siempre se ha dicho que la calle es la mejor de las escuelas. Estas leyes deberían rediseñarse y enfocarse para los adultos, a determinados adultos, que son los que en verdad las necesitan. Este meme es la prueba. No se puede bromear con el dolor. No se puede jugar con el sufrimiento. La sociedad (o el Estado, como dice el meme) lo que tiene es que hacer la vida más fácil a las personas.
Hace un par de años vimos un meme similar, pero este iba contra alguien en concreto, con nombres y apellidos: Ángela Ponce. Y así lo denunciamos. En Shangay tenemos claro que queremos enarbolar la bandera de tolerancia cero contra este tipo de ‘bromas’ de penoso gusto, pues aquí no se puede aplicar el ‘dudoso’ que se suele usar cuando no se comparte una gracia.
Me gustaría saber si tienen el valor de enviar ese meme a una niña que nació en un cuerpo de niño y que sufre por ello. O que no sabe cómo decírselo a sus padres. Imagino que ese es el mismo sufrimiento que ellos sentirían cuando se les derrama una copa de Dom Pérignon en su bolso de Gucci. Aunque igual no les afecta tanto. Porque quizás es de los chinos y es falso. Igual es que son #TransEconómicos de verdad. Lo que las Spice Girls llamaban Wanabe… StopTransfobia.
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