En la marcha neonazi que desfiló el sábado por el madrileño barrio de Chueca se profirieron insultos hacia el colectivo LGTB como «fuera sidosos de Madrid», «fuera maricas de nuestros barrios» o «tú no eres español, porque no eres blanco». En un principio, la manifestación había sido convocada por el grupo ultraderechista Madrid Seguro, y solicitada por una asociación de vecinos de San Blas Canillejas para protestar contra «las agendas 2030/2050″. Ahora, la Fiscalía ha abierto una investigación por delito de odio, y el Ministerio Público ha pedido información tanto a la Policía Nacional como a la Delegación del Gobierno sobre esta concentración ultra.
«No había nada que pudiera coartar el derecho de manifestación», han dicho fuentes de la Delegación del Gobierno, que afirman que no autorizaron ninguna marcha nazi ni homófoba. Sin embargo, la Fiscalía de Madrid ha explicado en un comunicado que ya ha abierto diligencias penales por un delito de odio: «Se han oficiado sendos informes a la Brigada Provincial de Información y a la Delegación del Gobierno para que recaben información sobre si lo acontecido durante la marcha convocada por Madrid Seguro es constitutivo de un delito de odio».
Aunque al principio el motivo de la manifestación fuera uno, al final resultó ser otro. Los manifestantes llevaban pancartas con simbología nazi y mostraron su repulsa hacia el colectivo LGTB y hacia los inmigrantes. Isabel Rodríguez, ministra de Política Territorial y portavoz del Gobierno, ha afirmado que actuará con total contundencia contra esta marcha antiLGTB, e Irene Montero, ministra de Igualdad, acelerará «el trámite de la ley de derechos LGTB y Trans«.
Desde IU han pedido la dimisión de la delegada del Gobierno, la socialista Mercedes González, aunque haya pedido disculpas por «el engaño» sufrido por parte de esa asociación. «Tenemos todas las armas jurídicas en nuestras manos para que cualquiera que quiera engañar a la Delegación sepa que la va a tener en frente».
En el gobierno municipal, Inmaculada Sanz, portavoz y delegada de Seguridad y Emergencias, ha descrito de «inaceptables en una sociedad democrática» las consignas que gritaron los manifestantes, y la vicealcaldesa Begoña Villacís ha asegurado que «el odio no tiene que entrar en las calles de Madrid porque la capital es el aire que está fuera del armario».
Tanto Más Madrid como los socialistas acusaron al PP de «negar que los discursos de odio existen», y criticaron a la presidenta Isabel Díaz Ayuso por negar la homofobia en la región. En cambio, Vox acusó al PSOE de estar detrás de la marcha contra el colectivo LGTB y afirmó que «apesta a cloaca socialista», y dijo que los manifestantes «no representan a ningún español» y que son «una banda de locos y fanáticos que van gritando barbaridades». De un modo u otro, la LGTBfobia sigue siendo alimentada por discursos de odio que terminan en agresiones hacia el colectivo, tal y como demuestra el índice de los delitos de odio, que ha aumentado un 45% desde 2014.
Vamos a defender todos y cada uno de los derechos del colectivo LGTBI. Ni un paso atrás. pic.twitter.com/5XGty5n4V3
— Irene Montero (@IreneMontero) September 20, 2021
Según @IdiazAyuso la “homofobia” sólo existía en nuestras cabezas y para @AlmeidaPP_ era exagerado señalar a la ultraderecha incitación odio, no se si conocerán estos neonazis que ahora mismo están en Chueca gritando “fuera maricas nuestros barrios” y “fuera sidosos de Madrid” ✋ https://t.co/8vu73BMOJd pic.twitter.com/GiTe7kcdgf
— Carla Antonelli / 🏳️⚧️☂️ (@CarlaAntonelli) September 18, 2021
Lo que ha pasado hoy en Chueca es intolerable. La Delegación de Gobierno de Madrid debe dar explicaciones: pic.twitter.com/n0qlXE1zct
— Íñigo Errejón (@ierrejon) September 18, 2021
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