Puede que el portorriqueño Lyanno, de 26 años, no sea todavía tan conocido como su compatriota, y buen amigo, Rauw Alejandro. Al que, por cierto, vino a telonear en su reciente concierto madrileño. También es verdad que esa fue su primera visita a nuestro país. Pero no pasó desapercibido, ni mucho menos. Las y los fans que hacían guardia a la puerta de su hotel indicaban que era muy esperado por sus admiradores.
Lyanno llama la atención de primeras –además de por su imponente apariencia física– por su cercanía. De hecho, nada más terminar nuestra charla salió a saludar a sus «fanáticos», como les llaman en Puerto Rico. Se mostraba ante todo agradecido por esta oportunidad de poder empezar a abrirse camino en nuestro país, dado, además, que son muchos sus compatriotas que ya son realmente conocidos aquí. Él también quiere serlo.
Va por buen camino, no cabe duda. Acaba de lanzar nuevo single, 24/7, y la última colaboración hasta el momento con su colega Rauw, Poderosa, no ha pasado ni mucho menos desapercibida. Y ahora apuesta de nuevo fuerte con su nuevo single, 24/7. «Cuando grabé el tema con Maikel Delacalle [DM] fue cuando empecé a notar mucho interés desde España, aunque hasta ahora no se han dado las circunstancias para visitar el país», cuenta. «Han pasado muchas cosas increíbles desde que empecé a hacer música en 2014». Entonces Lyanno tenía 19 años. «Al sacar Exclusiva, en 2016, empecé a tomarme mi carrera muy en serio».
«Con Rauw Alejandro llevo colaborando desde los inicios de nuestras carreras»
La primera intención de Lyanno era hacer directamente reguetón, «pero perdí esas grabaciones». Cambió de idea, y apostó por subir a Soundcloud temas de r’n’b, «porque era un estilo que nadie estaba haciendo en Puerto Rico en ese momento«. Le flipaba The Weeknd, «que estaba haciendo su transición del underground al mainstream, y me enamoré de su proyecto, me ha influido mucho». Cuenta que también le inspiraban artistas como Chris Brown o Trey Songz, «me encanta ese flow de r’n’b gringo». Y él quiso llevarlo a lo latino, a lo suyo.
Siendo como es un artista que no duda en explotar su vena sexy, tiene sentido que apostara por el r’n’b. «Me encanta el tono sensual del género. Unos temas eran más explícitos que otros, y sentía que me podía desenvolver mejor así que haciendo reguetón». Recuerda que, poco a poco, en la escena portorriqueña fueron dejando de lado el trash y fueron cogiendo fuerza estilos como el dancehall, «y como el público empezó a demandar esos ritmos, empecé a acercarme a ellos, pero sin perder mi esencia. Porque si todo el mundo se va hacia la derecha, a mí me gusta irme hacia la izquierda».
Colaboraciones como las que ha firmado en los últimos meses con artistas como Eladio Carrión y Rauw Alejandro también han contribuido a ampliar su público. «Con Rauw llevo colaborando desde los inicios de nuestras carreras», cuenta. «Hemos ido de la mano; ambos hemos apoyado los proyectos del otro en todo momento. Gracias a Dios, al bro ya se le dio de una manera bien grande [su éxito global es incontestable, desde luego], y estoy muy contento».
Se conocieron en un estudio en 2014, compartían productor y la conexión fue inmediata. «La química personal la vimos enseguida, y son ya siete años de amistad». De él destaca lo auténtico y humilde que es. «Tenemos mucho en común, a ambos nos encanta estar en familia». Lógicamente, supo de su relación con Rosalía mucho antes que el gran público, y se le escapa una sonrisa. «Lo sabía, sí. Y me alegra ver lo bien que están. Porque Rosalía, además de una gran artista, es muy buena persona. Estoy muy contento por ellos».
«Puedo ser muy explícito en mis canciones, pero siempre busco empoderar a las mujeres»
La principal fuente de inspiración de Lyanno en sus letras son las mujeres, pero desearía que no se le tachase de machista, porque siente que es todo lo contrario. «Puedo ser muy explícito, incluso crudo, en mis canciones pero jamás le voy a faltar al respeto a las mujeres», asegura. «En todo momento busco empoderarlas, y no me importa la opinión de quienes no conocen mi música y hablan por hablar». Algo que dice a media voz y sin atisbo de chulería. Y al preguntarle por su impacto en el público LGTBI, asegura estar feliz de conectar con él. «Hago música para que todo el mundo la disfrute. Mi música no entiende de reglas, y ver que tanta gente de la comunidad me apoya está cabrón. Porque al final la música es música, y qué más da tu color, tu género o tu presencia sexual para disfrutarla. Todos somos iguales al final».
Sin duda, a muchos de esos «fanáticos», Lyanno les ha entrado por la vista, porque sabe cómo explotar su vena sexy sin cortarse –os remito a sus redes sociales–, y él, bien orgulloso de exhibirse. «Es cuestión de que soy joven, no tengo problema en salir así y sé que quienes me siguen lo agradecen», afirma. «Me gusta que la gente disfrute todo lo que tengo que ofrecer antes de que me haga viejito», y se echa a reír. «No me da ninguna vergüenza mostrarme tal y como soy». Asegura que de su imagen se ocupa él principalmente, «aunque también tengo un stylist, Óscar, que es la caña, y que sabe muy bien cuál es mi flow: sexy, enseñando brazo, me gustan mucho las Jordan…».
«Soy joven y me gusta que la gente disfrute viéndome como soy»
Se ve en sus vídeos que no tiene miedo a arriesgar en ocasiones en cuanto a looks, porque es consciente de que ya no hay por qué limitarse a una imagen tradicionalmente heteronormativa. «Mira al [Bad] Bunny, que se pone lo que le apetece cuando sea. Es uno de los que abrieron camino en ese sentido. Tengo muchas ganas de conocerle personalmente bien, porque solo nos hemos saludado un par de veces. Ojalá llegue el momento de que compartamos algo genuino«. Visto el listado de colaboraciones ilustres que ya tiene en su currículum, seguro que no tarda en llegar. «Ojalá colaborar con Rosalía también. Y otra artista española me gusta mucho es Bad Gyal». Todo se andará.
De momento, su prioridad es lanzar un álbum que verá la luz a principios del año que viene. Y después, vuelta a sus orígenes. «Tengo un proyecto centrado por completo en el r’n’b», avanza. «Es como empecé y quiero seguir reivindicando el r’n’b latino, porque no somos tantos los que apostamos por él en español. Para mí es importante no olvidarme de mi esencia». Y mantenerse en sus trece. «Es lo que te decía antes, que si todos se van en una dirección, yo cogeré la contraria».