Gabriel J. Martín presenta 'Gaynteligencia emocional': "Los libros nunca sustituirán a la terapia"

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Todos necesitamos manejar nuestras emociones de la manera más beneficiosa para nuestra vida. Una vez más, Gabriel J. Martín, autor de manuales tan celebrados como Quiérete mucho, maricón, El ciclo del amor marica o Gay Sex –uno de los libros LGTBI retirados de los institutos en Castellón–, quiere ayudar en lo posible a sus lectores gais a encontrar respuestas a muchas preguntas y a descubrir herramientas con las que gestionar situaciones complicadas para quienes se salen de los caminos marcados por la sexualidad normativa impuesta por el heteropatriarcado.

La aparición de la pandemia fue clave para que Gabriel J. Martín decidiera cuál sería su nuevo proyecto escrito. “Todos nos hemos enfrentando a momentos muy complicados en este tiempo. Pero hay cosas de las que no somos conscientes. Muchos lectores me están agradeciendo que este libro les esté ayudando en ese sentido”. Martín tiene claro que obras como las suyas no pueden sustituir al trabajo con un especialista, “porque el proceso de cada persona es absolutamente personal”.

Una vez más, Gabriel J. Martín se centra en los hombres gais, su especialidad. “Hay un punto clave en los hombres homosexuales, y en las personas LGTB en general: nos hemos enfrentado a unos retos emocionales tremendísimos, desde pequeñitos, que una persona cis heterosexual madura no superaría”. Su principal deseo es que este libro contribuya a enfrentarnos y comenzar a superar algunos de esos retos, y hay que agradecérselo. «Es que todo el bullying a que se enfrentan las personas LGTBI cuando aún no tienen herramientas para ello deja secuelas. De ahí el miedo a que nos rechacen, nos agredan, la vergüenza de mostrarnos como somos… De eso trato en la primera parte del libro».

«Lo que nos ayuda a gestionar las emociones negativas es socializar, algo que no pudimos hacer durante tiempo»

De nuevo, quiere dejar claro que sus obras no son herramientas que hagan magia. «Los libros nunca pueden sustituir a la terapia. Porque hay que ver cuáles son los condicionantes familiares y educativos, concretos de cada persona». Los psicólogos trabajamos con lo que verbaliza el paciente. Y hay cosas que están ahí, pero quizá este no ha compartido aún». Ahí es donde más puede ayudar una obra como Gaynteligencia emocional. «Si te encuentras con libros que tratan temas como estos y de repente lees algo en lo que no habías caído… Porque solo hablas de las cosas a las que puedes poner nombre». Que el lector sepa más sobre la inteligencia emocional cuando está en terapia también permite al profesional que le trata dar un mejor diagnóstico.

Cabría pensar que Martín pudiera perder pacientes por el hecho de ofrecer tantas herramientas a través de sus libros y sus redes sociales, pero él no lo ve así. «Es algo que pensé hace mucho tiempo, sobre todo cuando comencé con mi canal de YouTube, en donde comparto muchas cosas gratis», explica. «Pero la realidad es que tengo lista de espera de meses. Y el hecho de tener ya un nexo creado con la persona que conoce tu estilo de comunicarte da confianza a los pacientes«. Asegura que así aprovecha más las consultas, «de hecho, porque es más fácil ver los temas a tratar».

No tenía planeado que después de tratar el sexo gay se centraría en las emociones, pero así ha resultado. «Tenía varios proyectos en mente, y terminamos apostando por Gaynteligencia… porque, después de un puto año de mierda como ha sido 2020, pensamos que podría funcionar». Porque es evidente que de unos años para acá, la inteligencia emocional está en boca de todes. «La covid ha tenido mucho que ver. Porque el libro de Daniel Goleman Inteligencia emocional se editó en 1995, y desde entonces, tanto en psicología como en autoayuda, se ha hablado muchísimo de ella…». Con la llegada de la covid-19 a nuestras vidas se han generado reacciones emocionales muy fuertes. «Ansiedad, miedo, depresión, tristeza… e incluso culpabilidad. Hemos tenido que enfrentarnos a una carga emocional gigantesca. Y lo que nos suele ayudar a gestionar las emociones negativas es socializar y hacer la mamarracha, algo que no pudimos hacer durante mucho tiempo».

Llega el momento también de hablar de resiliencia, dado que el subtítulo del libro es Más resilientes de lo que pensamos. «Está clarísimo que, a pesar de todas las dificultades a las que nos hemos enfrentado, antes y ahora, hemos logrado hacer vidas funcionales: creamos nuestros propios hogares, nos hemos organizado social y políticamente, hemos cambiado las normas en un montón de países, hemos creado espacios de inclusión y estamos logrando que se nos dé nuestro sitio en la sociedad…». Sin duda, son logros a tener muy en cuenta, que nos deben permitir ver todos los obstáculos que hemos superado. «Qué capacidad la de este colectivo de recuperarse a pesar de los traumas, es admirable. Muchas veces no somos conscientes de ello, y debemos serlo».