Estreno. García Picasso apuesta por el pop genderless en el vídeo de 'Pobre Ferrari'

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García Picasso, artista granadino afincado en Berlín, estrena en Shangay el vídeo de su nuevo single, Pobre Ferrari. Una apuesta rotunda por un pop sin género definido, o genderless, porque en su próximo álbum, Color de género, ese es uno de los temas de los que habla abiertamente.

García Picasso, que ha formado parte de proyectos como Kid Simius y Kilnamana, vio cómo una de las canciones de su anterior grupo formó parte de la banda sonora de The New Pope, la serie de Paolo Sorrentino. Entonces todavía no utilizaba el nombre artístico con el que firma Pobre Ferrari.

Su nueva propuesta supone una ruptura con su pasado artístico a todos los niveles. Con este proyecto,  García Picasso ha creado un personaje artístico, cuya estética, propia del género fluido, está inspirada en artistas a los que admira, como David Bowie, Frida Kahlo y Pablo Picasso.

«Este vídeo es para mí una manera de liberarme, y de expresarme sin complejos»

Su apuesta por lo genderless va más allá. A la hora de interpretar la electropera Pobre Ferrari en el videoclip que estrenamos, rodado en Berlín, se hace acompañar de una banda virtual, a la que ha llamado Los Picassitos, y que son deliberadamente músicos sin género definido. «No sé quién inventó el concepto de género, pero estoy seguro que nunca se imaginaría todo el daño que nos ha hecho», afirma García Picasso.

El artista continúa explicando el porqué de esta apuesta firme por una vida, y una música, sin etiquetas. «Este vídeo es para mí una manera de liberarme, y de expresarme sin complejos», afirma. «Siempre he tenido la sensación de que mi música es un poco rara, que no encaja dentro de un género concreto. Eso me ha hecho llegar a la conclusión de que uno no vale más por parecerse a los demás, sino por parecerse a sí mismo. Este sentimiento me ha dado fuerza para grabar el álbum Color de género«.

En su próximo disco, que verá la luz antes de verano, asegura que ha querido tratar temáticas sensuales que conforman un trabajo de atmósfera ambigua, fruto de la fusión entre géneros musicales y sexuales. «Al fin y al cabo, de lo que se trata es de eliminar prejuicios, sea en la música, en la ropa, en el arte o en las reuniones familiares», concluye García Picasso. Así demuestra esta actitud en Pobre Ferrari, que ya puedes ver aquí.