Uno de los temas más delicados a los que nos enfrentamos en la actualidad es el bullying o acoso escolar. Una práctica cada vez más extendida que se basa en el maltrato psicológico, verbal o físico producido entre escolares de manera reiterada, y que puede llegar a tener consecuencias catastróficas como traumas de por vida o incluso el suicidio de los escolares.
Suicidios de los que, por desgracia, hemos sido tantas veces testigos, como los recogidos en estos artículos: El dramático suicidio de una adolescente trans, Trágico suicidio tras confesar que era gay, Niño de 12 años se suicida por bullying homófobo.
Si bien el acoso escolar no es un mal nuevo en la sociedad, pues es algo que hemos conocido todos en las aulas de la escuela, parece que ahora la violencia y la agresividad de estos hostigamientos se ha hecho más pronunciada en las últimas generaciones, y se ha extendido además a los medios cibernéticos, el llamado ‘ciberacoso’ en redes sociales, aplicaciones móviles, vídeos, etc.
Los homosexuales, bisexuales y transgénero siempre han supuesto un llamativo colectivo con el que ensañarse. Incontables son las historias en primera persona de niños y niñas gays que han sufrido el acoso y agresiones de sus compañeros en sus años de escuela. Una tendencia que ha intentado ser paliada por una sociedad cada vez más tolerante.
El bullying se traduce en muchas formas de acoso: bloqueo social (29,3%), hostigamiento (20,9%), manipulación (19,9%), coacciones (17,4%), exclusión social (16,0%), intimidación (14,2%), agresiones (12,8%) y amenazas (9,3%). Un daño que ha elevado el número de suicidios entre escolares, como os contábamos en dichos artículos.
A la vista del latente problema, nos hemos querido interesar por algunos estudios que abordan el tema y sugieren algunas medidas para evitarlo. A continuación te presentamos unas recomendaciones publicadas por profesionales en la web wikihow que nos indican cómo gestionar una situación de bullying escolar.
1. Comunícate con tus acosadores: No demuestres que les tienes miedo, esto solo empeoraría la situación. Intenta comunicarte efectivamente con los compañeros que te molestan y enfréntate a ellos para buscar una solución común. El enfrentamiento no debe suponer una respuesta física, sino una actitud de oposición a la situación que estás sufriendo.
2. Mantén tu autoestima alta: Las víctimas de acoso escolar suelen ser jóvenes con problemas de autoestima. Aprende a valorarte a ti mismo y recuerda que no has hecho nada para merecer ser desprestigiado por nadie. Quererse a uno mismo suele ser el primer paso para ser querido por los demás.
Además, los acosadores no se atreverán a molestarte si inspiras confianza en ti mismo y seguridad. Si sientes que no logras alcanzar este punto, no lo dudes, pide ayuda y considera consultar a un especialista en estos temas.
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3. Rodéate de buenos amigos: Recuerda que las personas que pierden el tiempo insultándote o burlándose de ti no merecen tu amistad, no te molestes en gustarles, no merecen tu atención. Si logras hacer buenas amistades, conseguirás aliados en tu lucha contra el bullying. Un amigo es un tesoro.
4. No recurras a la violencia: Esto solo te puede generar más problemas, y ponerte en situaciones de peligro.
5. No promulgues la impunidad: Si no puedes encontrar una solución a través del diálogo, no dudes en denunciar a tus agresores ante las autoridades pertinentes. Recuerda que no eres el único alumno que padece este tipo de problemas y que ignorar el problema no va hacer que desaparezca.
¿Qué puede hacer el centro escolar?
Esta es la pregunta que se formuló Aitor Martxueta, de la Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea, en su tesis doctoral. Una tesis que lleva por título Claves para atender a la diversidad afectivo-sexual en el contexto educativo, y en la que el autor además analiza otros estudios, como: las actitudes de los jóvenes hacia la diversidad afectivo-sexual, la homofobia, el acoso y la discriminación de estudiantes LGTB en España y en otros países del mundo. Y que concluye con esta serie de medidas para evitar el bullying homófobo en escuelas:
1. Escuelas que establezcan medidas explícitas y de concienciación contra la homofobia: Las evidencias empíricas constatan que aquellas escuelas que establecen criterios para hacer frente a la homofobia y las conductas de bullying homófobo consiguen climas escolares más seguros, con un menor número de situaciones de acoso relacionado con la orientación afectivo-sexual, donde el alumnado indica sentirse más seguro y por lo tanto, manifiesta un mayor bienestar.
Como el buen ejemplo que os presentabamos en este artículo sobre un colegio de Canarias contra la homofobia.
2. La elaboración de un currículo inclusivo: Un programa que garantice un entorno escolar seguro basado en el respeto a los derechos humanos, entre alumnos heterosexuales, homosexuales y bisexuales que los haga sentirse integrados en un mismo grupo, en única realidad social.
3. Formación al profesorado, alumnos y padres: Y señala la importancia de no olvidar este último grupo, que es la principal referencia de los menores; ya se sabe que imitamos lo que vemos en casa. Un adiestramiento para evitar conductas homófobas y crear más conciencia sobre las repercusiones del odio y la intolerancia.
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Por su parte, COGAM concluía su estudio Investigación homofobia en las aulas ¿educamos en la diversidad? con una serie de recomendaciones para los centros educativos de jóvenes y menores:
1. Un Proyecto Educativo que incluya la diversidad afectivo sexual: El centro debería incorporar específicamente la necesidad de educar en el respeto de la diversidad afectivo-sexual para prevenir el acoso homofóbico. Es deci,r que se enseñe con normalidad que existen también personas homosexuales, bisexuales o transgénero.
2. Que la política anti bullying homofóbico sea una responsabilidad de toda la comunidad educativa: Centro, profesorado, alumnos y padres.
3. Actividades contra la homofobia: Charlas, talleres, jornadas de sensibilización, visibilización de la realidad LGTB.
4. Incluir la homosexualidad, bisexualidad y transexualidad en la educación que se imparte, mencionando referentes LGTB en la historia y sus eventos relevantes, y desafiando abiertamente el bullying y la homofobia en el lenguaje.
5. Disponer de protocolos claros ante casos de bullying homofóbico y delitos de odio dentro y fuera de sus aulas. Con una actuación rápida y contundente.
6. Desarrollar planes de apoyo y atención especial a las víctimas de bullying homófobo y promover la denuncia a la Policía de actuaciones que puedan ser constitutivas de delito.
7. Profesorado LGTB que pueda expresarlo públicamente, o con mentalidad tolerante en este aspecto que puedan especialmente tratar los temas de bullying homófobo en las escuelas.
8. Involucrar activamente a los jóvenes en el diseño de políticas para combatir el bullying y los delitos de odio, favoreciendo que razonen por sí solos sobre esta problemática.
9. Facilitar al alumnado LGTB un canal que les permita informarse, para cuidar su salud y su integridad.
10. Fondos bibliográficos y/o audiovisuales en la Biblioteca relacionados con las necesidades del colectivo LGTB.
11. Un equipo de orientación psicológica, que entre otros asuntos, dé servicio a los jóvenes LGTB que se sientan acosados. Y que puedan derivar a su vez a estos alumnos a las asociaciones LGTB, con las que proponen tener más comunicación, para que les puedan ayudar.
En resumen, los centros no solo deben luchar contra el bullying homofóbico y los delitos de odio. Precisan crear un clima en el que la diversidad afectivo-sexual sea percibida como una manifestación natural que debe ser respetada por toda la comunidad.