Un matrimonio ha sido condenado en València a 6 meses de prisión y a una multa de 540 euros cada uno, además de la inhabilitación para trabajar en los ámbitos de la docencia, ocio y deporte, tras insultar reiteradamente a la novia de su hija hace tres años.
En aquel entonces, las jóvenes, que mantenían una relación sentimental, eran menores de edad. Según el escrito del fiscal, Héctor Melero, los acusados actuaron “por la animadversión a su orientación sexual”. El matrimonio insultó a la pareja de su hija en la puerta de su instituto con estas palabras: “Guarra, zorra, lesbiana de mierda, no te acerques a mi hija, lo tuyo es una enfermedad y se la estás contagiando a mi hija”. Estos hechos ocurrieron en más de una ocasión cuando la denunciante se encontraba por la calle o en la salida del instituto, en un municipio de la comarca de La Safor (Gandía, Valencia) en el que todos residían.
En octubre del año 2021, los acusados fueron al recinto ferial donde se encontraba su hija junto con su novia y otras amigas, y se dirigieron a esta de una forma muy alterada y agresiva, además de con un lenguaje no verbal violento que asustó a las menores. Tuvieron que intervenir los guardias de seguridad del recinto.
La acusada también llamó por teléfono a la madre de la otra joven para preguntarle si le parecía normal la relación entre sus hijas, a lo que añadió: “Esto no puede ser, tu hija está enferma […] Si hace falta la mataré a palos”.
Los hechos por los que se acusaba al matrimonio incluían insultos, vejaciones y humillaciones tanto a su hija como a la pareja de esta. De manera reiterada, llegaron incluso a llamar a la madre de la pareja de su hija con expresiones de claro contenido intimidatorio, humillante y tendentes a evitar la relación.
Como los acusados y la defensa han llegado a una sentencia de conformidad, el juicio que iba a tener lugar ayer, 23 de julio, en la Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de Valencia, no ha llegado a celebrarse. El matrimonio ha sido condenado por un delito de odio, pero según ha explicado el fiscal, “Aal tratarse de delincuentes primarios la pena quedará suspendida si no vuelven a delinquir en un periodo de dos años”.
Al parecer, el matrimonio ha decidido aceptar la condición sexual de las jóvenes, que continúan manteniendo su relación sentimental, así como entablar una relación cordial con ellas. La madre de la denunciante ha asegurado que este proceso judicial ha sido doloroso y difícil.