Aunque más de cinco siglos separan las historias de La Malinche y Chanel, puntos en común no les faltan. Sus raíces latinoamericanas las unen, así como la polarización que han sufrido como reconocidos personajes, con sus partidarios y detractores; sin embargo, el temperamento para sobreponerse a las adversidades les ha válido a ambas para dejar huella.
Es 1519 y Moctezuma II rige los destinos del pueblo mexica, entre el temor y la veneración de sus súbditos. Unos años antes, al otro lado del mar, se asientan sugerentes relatos que llegan desde el Nuevo Mundo y que hablan de un imperio poderoso y muy rico en oro. Estimulados por los aires modernos, centenares de aventureros no dudan en dejarlo todo y hacerse a la mar. Entre ellos, un joven hidalgo extremeño, Hernán Cortés, quien en 1504 consigue partir hacia La Española.
Mientras tanto, en una zona fronteriza de la actual Tabasco, la pequeña Malinali es vendida como esclava a los mayas a los 9 años, iniciando de forma inconsciente un destino como intérprete, asesora y diplomática que habría de resultar trascendental muy poco después, cuando de esclava regalada a Cortés transmuta en doña Marina, dama respetada y amada. Un proceso en el que transformará para siempre el curso de la historia al dar a luz a Martín Cortés y convertirse en la madre simbólica de una nueva cultura mestiza.
En 1519, Malintzin, la antigua esclava Malinali Tenepal («la que habla con mucha vitalidad»), se erigió en medio de dos grandes hombres como la mujer más importante de la crónica de la construcción de América.
A pocos días de conocer los resultados de Eurovisión 2022 y de ver brillar a Chanel sobre el escenario del Pala Olímpico de Turín (Italia), la crónica de esta representación para España ya está asentada: una joven de 31 años nacida en La Habana que emigró con sus padres a Barcelona (ella cubana, él catalán) a los 3 años, ha sido la elegida para representar al país que la ha visto crecer y convertirse en la artista que es hoy en día.
Y es que Chanel ha conseguido con esfuerzo y perseverancia hacerse un nombre en este complicado mundo. Desde muy niña interesada en el mundo de las artes, la música y la danza. Con 6 años hacía gimnasia rítmica y daba clases de canto e interpretación. Lo que la fue llevando, por su polifacético desempeño, a participar en múltiples musicales. O a subirse en grandes escenarios internacionales, como la gala de los MTV Europe Music Awards de 2010, para bailar junto a Shakira.
Chanel también ha intervenido en series como Águila Roja, Wake Up, Gym Tony, El Continental, Cupido, El secreto de Puente Viejo o El Inmortal, así como en la película El rey de la Habana, de Agustí Villaronga. E incluso fue una de las finalistas para interpretar el papel de Anita en la adaptación de West Side Story dirigida por Steven Spielberg.
“Chanel es una bestia en el escenario, tiene una potencia, tiene una emisión de cosas, en diez segundos hace veinte cosas… Es una artista de las más fuertes que yo he visto como impacto”, ha declarado Nacho Cano, quien nuevamente se erige como un especialista en descubrir nuevos talentos.
Bajo los mandos de Nacho Cano, el musical pretende poner en valor –y sobre uno de los grandes escenarios españoles– la celebración del encuentro entre dos pueblos y sus culturas y reivindicar lo que somos: una extraordinaria comunidad lingüística y cultural, unida por el mestizaje.