La madrugada del pasado domingo las redes sociales se conmovían con el testimonio de Daniel Duque Duro, el primo de la actriz Andrea Duro. Según el joven, el portero de una conocida discoteca de Alcorcón le propinó una serie de golpes por el mero hecho de ser gay.
Ante tal injusticia, su prima, aprovechó su gran influencia para compartir en Internet este desagradable suceso y así, hacer ver a sus seguidores que la homofobia sigue siendo una realidad. Indignada, la artista tachaba la situación de vergonzosa: «Puta vergüenza, puto homófobo, puto retrógrado». Y pedía explicaciones a la discoteca. «¿Qué puede suponer para vuestra imagen que dos personas del mismo sexo se besen en la puerta de vuestra discoteca (vía pública, por cierto)?».
Por su parte, su primo, Daniel Duque, también denunció lo sucedido en su cuenta de Facebook e Instagram: «Acabo de salir de la discoteca Jowke de Alcorcón. Por darme un beso con mi pareja un puertas de la discoteca me ha pegado un guantazo en la mejilla y me ha sacado el hombro. Tengo una luxación fuerte de hombro, un corte en la ceja y en la mejilla. Salió detrás nuestra al grito de «¡Aquí no queremos maricones!»
Pedimos máxima difusión».
Así denunciaba Daniel Duque en su cuenta de Facebook lo ocurrido la madrugada del pasado sábado. Acababa de salir de la discoteca donde había pasado una noche de fiesta junto a su novio Diego y algunos amigos cuando, según cuenta Duque, uno de los porteros de la discoteca se abalanzó sobre él, le dio un puñetazo y lo tiró al suelo. ¿El motivo? Un beso entre Daniel y Diego.
El joven acabó con una luxación en el hombro y varios cortes en la cara producidos, según relata él mismo, por los anillos que el portero llevaba en los dedos. Las unidades de emergencia y la policía se desplazaron hasta la puerta del local para atender a la victima.
Lejos de quedarse callado, Duque decidió denunciar a través de redes sociales lo ocurrido. Solamente en Facebook, su publicación ya acumula más de catorce mil likes y ha sido compartido casi cuarenta mil veces.
Ante tal situación, la discoteca se vio obligada a lanzar un comunicado donde negaba lo ocurrido. «La empresa Jowke no discrimina por razón de raza, sexo o religión y cuenta en su plantilla con personal de muy distintos orígenes, nacionalidades y condiciones».
Duque, después de toda la difusión, agradeció en su Instagram el apoyo recibido aunque pedía tranquilidad. «Hoy he pasado el peor día de mi vida y no quiero sabes nada más del tema. Gracias por el apoyo».
Es aterrador que la seguridad de la discoteca te haga sentir inseguro. Que lejos de protegerte, te ataque. En lo que llevamos de año, solo en la Comunidad de Madrid han tenido lugar 201 agresiones LGTBfóbas. Casi una al día. 35 de ellas tuvieron lugar durante el fin de semana del Orgullo 2018, según datos de Arcópoli.