Fue elegido el 1 de abril, y compartirá el cargo con Oscar Mina durante seis meses en el Gran Consejo General. “Probablemente, seré el primer jefe de estado LGBTIQ+ del mundo”, dijo Rondelli en una publicación de Facebook. Fue embajador en Estados Unidos hasta 2016, y hasta la fecha era diputado en el parlamento de San Marino, además de un firme defensor de los derechos de las personas LGTBIQ+.
“Es un día histórico, que me llena de alegría y orgullo, porque Paolo Rondelli será el primer jefe de Estado perteneciente a la comunidad LGTBIQ+, no solo en San Marino, sino en el mundo”, agregó Monica Cirinnà, senadora de la república de Italia. Arcigay Rimini, una organización de derechos LGTBIQ+ con sede en la ciudad italiana, agradeció a Rondelli “su servicio a la comunidad LGBTIQ+” y su lucha “por los derechos de todos” en una publicación de Facebook.
Aunque Rondelli es el primer jefe de estado LGTBIQ+ conocido, en otros países sí hay jefes de gobierno queer, como Xavier Bettel, primer ministro de Luxemburgo, o Ana Brnabić, primera ministra de Serbia.
Arcigay Rimini dijo que esperaba que Italia siga el ejemplo de San Marino “desde este camino de progreso y derechos civiles”. Y es que el país transalpino ha sido criticado por su lentitud a la hora de tomar medidas sobre los derechos LGTBIQ+, ya que el año pasado su Senado bloqueó un proyecto de ley para abordar los crímenes de odio contra las mujeres, las personas LGTBIQ+ y las personas con discapacidad después de una intervención sin precedentes del Vaticano.
San Marino introdujo el reconocimiento legal para parejas del mismo sexo en 2016. Este fue un paso significativo para el estado, donde la homosexualidad se castigaba con pena de cárcel hasta 2004. San Marino es una de las pocas ciudades-estado de Europa que sobreviven hasta nuestros días, junto con Andorra, Liechtenstein y Mónaco.