Conocida por sus intervenciones en la serie Transparent –también por la polémica en que se vio envuelta al denunciar acoso por parte de su protagonista, Jeffrey Tambor– o en la película Estafadoras de Wall Street, Monica supone el primer papel protagonista de Trace Lysette.
De esta película se siente especialmente orgullosa por lo mucho que se ha involucrado en ella –también es productora ejecutiva– y por lo que supone a nivel de visibilidad trans.
La Monica protagonista vuelve en la cinta a su ciudad natal y se reencuentra con su madre enferma, con la que cortó lazos muchos años antes cuando esta se mostró incapaz de aceptar que tenía una hija trans. Su convulsa vida se revuelve aún más al tener que enfrentarse a los fantasmas del pasado y a su familia.
Trace Lysette reconoce en esta entrevista –vía Zoom desde Los Ángeles– haber vivido algunas cosas de una manera muy parecida a su personaje. Monica tuvo su estreno nacional en el Festival de Cine de Gijón, al que no pudo acudir, y sueña con que se vea en todo el mundo, tras su reciente estreno en Estados Unidos.
SHANGAY ⇒ ¿Cómo recuerdas tu paso por el Festival de Venecia?
TRACE LYSETTE ⇒ Fue como una montaña rusa. Allí convivieron grandes películas de la maquinaria de Hollywood con otras pequeñitas y especiales como la nuestra, compartiendo espacio, porque todos los participantes compartimos esa enorme alfombra roja en el Lido (yo, vestida de Valentino, nada menos). Fui feliz de que se viera la nuestra, que relata una historia importante que siento que no se había contado antes; es una película que puede ayudar a salvar vidas y que ojalá inspire a personas de las nuevas generaciones a soñar con ambición, a ver que pueden ser protagonistas de una película, por ejemplo. Es importante que cada vez haya más posibilidades para nosotres, y que nuestro arte se vea en todo el mundo.
«En Venecia me pregunté: ‘¿de verdad es la primera vez que una actriz trans vive esto?»
SHANGAY ⇒ ¿Qué supuso ser consciente de que con tu paso por esa alfombra roja, con todo lo que conllevaba, estabas haciendo historia como mujer trans?
TRACE LYSETTE ⇒ Tuve sentimientos encontrados. Obviamente, me sentí muy bien, me sentí validada. Porque el festival me vio como una actriz principal que merecía competir por un premio muy importante. Y veía mi nombre en la prensa junto al de actrices a las que admiro tanto como Cate Blanchett. Pero a la vez me preguntaba «¿de verdad es la primera vez que una actriz trans vive esto?». Sé que la aceptación de la diversidad no llega de la noche a la mañana, pero es que ha habido personas trans desde el inicio de la humanidad, y me entristece que nuestra historia haya sido borrada.
SHANGAY ⇒ ¿Cuánto tienes en común con Monica?
TRACE LYSETTE ⇒ Tenemos mucho en común. Yo también he vivido un viaje complicado con mi familia biológica, con momentos muy difíciles, aunque nuestro distanciamiento no duró veinte años como el de Monica. Desgraciadamente, lo que cuenta la película no es una excepción en la experiencia femenina trans. Las familias tienen que desaprender muchas de las ideas venenosas que la sociedad les ha inculcado, porque son víctimas, y solo así se puede recuperar el amor. Por eso ya no siento rabia hacia mis parientes de sangre, sé que siempre han actuado todo lo bien que han podido.
SHANGAY ⇒ Monica también intenta en la película crear una nueva dinámica con su madre y su hermano…
TRACE LYSETTE ⇒ Una vez es consciente de que a su madre no parece que le quede mucho tiempo, se va adaptando a la situación. Aunque en ningún momento tengan una conversación directa sobre el pasado, llegan a entenderse sin necesidad de palabras. Es algo por lo que yo he pasado también. Y esas situaciones resultan universales; todo el mundo se enfrenta a momentos complicados así con familiares, no solo las personas trans.
«Cada vez nos cuidamos más dentro de la familia trans, para lograr un impacto real en la sociedad»
SHANGAY ⇒ Te has dejado el cuerpo y el alma en este papel, ¿verdad? Porque además apareces en todas las secuencias…
TRACE LYSETTE ⇒ Absolutamente, es algo que sigo asimilando. Me enfrenté a días de rodaje de 16 horas, con muchas escenas realmente complicadas a nivel emocional. Varias de ellas, sin diálogo, y con mucho que transmitir de su interior. Ha sido un enorme desafío, que al final es lo que más me gusta de ser actriz. Porque venía de hacer mucha tele; personajes que a veces ni tienen frase, eres la «amiga 2» que pasa por allí en una secuencia [risas]. Esto es lo más hermoso que me pasado en mi carrera.
SHANGAY ⇒ ¿Cómo fue trabajar con Patricia Clarkson, que interpreta a la madre enferma de Monica?
TRACE LYSETTE ⇒ Es una profesional tan experta que trabajar con ella supuso una experiencia extra que añadir a la que supuso la película en sí. Recibía una masterclass de ella cada día que rodábamos juntas. Siempre estudio concienzudamente a los actores mayores que yo con los que trabajo; hice lo mismo con Judith Light en Transparent, rodar con ella fue increíble. Son regalos que me permiten incorporar nuevas herramientas que utilizaré de por vida.
SHANGAY ⇒ Al principio de la película la transexualidad de Monica solo es sugerida de una manera muy sutil… ¿Agradeciste ese tratamiento?
TRACE LYSETTE ⇒ Sí, agradecí mucho la manera en que Andrea y Orlando [Tirado] desarrollaron el personaje en el guion. Antes de rodar, le pasé un puñado de notas que había ido recogiendo. Porque es un proyecto en el que he estado involucrada unos seis años. A lo único que le dimos muchas vueltas en una conversación fue a si citar o no en la película el dead name de Monica, que iba a aparecer en una escena concreta, y me parece todo un acierto que se descartara. Muchos espectadores me han comentado que agradecen también que la palabra ‘trans’ no se escuche en ningún momento. Todos los detalles se trataron con gran sensibilidad.
SHANGAY ⇒ ¿Te habría gustado que una película como esta hubiera existido cuando eras más joven?
TRACE LYSETTE ⇒ Hubo una película italiana que me inspiró mucho en su día, Princesa, con Ingrid de Souza. Fue la primera vez que vi a una mujer trans protagonizar una película. Retrata su lucha, y cómo se ve obligada a prostituirse para sobrevivir. Mi juventud fue en parte así, justo estaba en ese punto cuando la vi. Siento que se no tuvo el reconocimiento que merecía, y siempre la reivindico.
SHANGAY ⇒ ¿Sientes que has hecho Monica en el momento perfecto, tanto vital como profesionalmente?
TRACE LYSETTE ⇒ Procuro no cuestionar el universo… [risas]. Pero una parte de mí no puede evitar lamentar que cuando tenía veintipocos no tuviera una oportunidad para convertirme en una starlette. Miro a Zendaya ahora, o pienso en Linsdsay Lohan en los 90, o incluso en Julia Roberts, artistas que explotaron de la noche a la mañana. Mi viaje está siendo muy distinto; estoy llegando a donde soñaba más mayor. Rodando algún capítulo en una serie tras otra, durante mucho tiempo, hasta llegar a hacer cine. Intento recordarme continuamente de que cada experiencia se aprende, aunque en ocasiones no acabo de entender por qué.
Lo importante es que nunca me he sentido tan feliz como ahora. Porque recuerdo cuando tenía veintipocos y me veo prostituyéndome, viviendo sola en Nueva York, para poder pagarme las hormonas y, después, mis clases de interpretación… Bueno, no he estudiado en una escuela de élite, pero todo lo que he vivido me ha enriquecido como actriz; en parte ha sido tan valioso como las clases que tomé.
SHANGAY ⇒ ¿Hubo un momento en que sentiste que por fin habías logrado tu sueño?
TRACE LYSETTE ⇒ Si te soy sincera, aún no siento que haya llegado. Tuve esa sensación cuando recibimos casi doce minutos de aplausos, con todo el público en pie, en Venecia… que no es cualquier festival [risas]. Pensé que se compraría la película para todo el mundo, entraría en la temporada de premios… Ahora lo siento como un espejismo, porque no pasó así. No me amargo, porque tengo la sensación de seguir en una montaña rusa desde el verano, y seguro que aún están por llegar grandes alegrías.
SHANGAY ⇒ Tu participación en la serie Transparent te dio una gran exposición a nivel mundial, y también graves disgustos… ¿Qué recuerdos te han quedado de aquel trabajo?
TRACE LYSETTE ⇒ Procuro recordar solo lo bueno que me aportó. Hacia el final se hizo todo muy duro, por las circunstancias a las que me tuve que enfrentar en el set. Pero si miro atrás, me encanta comprobar que fue el primer papel que me permitió demostrar lo que puedo dar como actriz (sobre todo, en el capítulo seis de la tercera temporada). Sigo teniendo mucho cariño a Joey Soloway y al resto de creadores de la serie, porque creyeron en mí. Todo actor busca a alguien que le dé su primera gran oportunidad, y esa fue importante para mí.
«Veneno refleja de una manera muy real por lo que pasamos, desgraciadamente, muchas mujeres trans»
SHANGAY ⇒ ¿Y Estafadoras de Wall Street?
TRACE LYSETTE ⇒ Solo tengo recuerdos felices de aquel rodaje. Comí un día con la directora, Lorene Scafaria, y conectamos tan bien que me escribió un papel expresamente. Lo que me pude reír con Lizzo, Cardi B y Keke Palmer; estaba rodeadas de mujeres con mucho talento y eso fue impagable. Ojalá podamos trabajar juntas de nuevo algún día, aunque no sé si existe alguna posibilidad de que haya una secuela.
SHANGAY ⇒ ¿Cómo viviste trabajar en una película concebida expresamente para el lucimiento de Jennifer Lopez?
TRACE LYSETTE ⇒ Me hizo mucha ilusión conocerla, porque crecí con ella. La recordaba como toda una «fly girl» en In Living Color, en el vídeo de That’s the Way Love Goes de Janet Jackson, en Selena…, y de ahí, al estrellato. Tuvimos momentos increíbles en los camerinos, con conversaciones típicas de chicas, hablando sobre todo de novios [risas]. Y resulta que tenemos un amigo en común, que para mí es como un hermano, Jack Mizrahi. Yo lo conozco de la escena ballroom, y colaboró con ella en su canción TENS, y eso también nos unió. Me habría gustado poder pasar más tiempo con ella, pero el poco que tuvimos fue genial.
SHANGAY ⇒ ¿Has visto Veneno?
TRACE LYSETTE ⇒ Por supuesto. Me encantó, a pesar de lo dura que es. Qué interpretaciones tan poderosas, qué historia. Es una serie que debería ver todo el mundo, porque refleja de una manera muy real por lo que pasamos, desgraciadamente, muchas mujeres trans en los 90 y los dosmiles. El mundo debe conocer esas historias para que podamos dar un paso adelante, y empezar a reflejar la felicidad trans, no solo nuestros momentos duros. Toda mi admiración para sus creadores.
SHANGAY ⇒ ¿Crees que estamos en el buen camino para dar ese paso adelante?
TRACE LYSETTE ⇒ Sí. Estoy alucinada con las propuestas que están poniendo sobre la mesa creadores trans con muchísimo talento que he ido conociendo recientemente, y que están moviendo proyectos muy interesantes. Veo luz al final del túnel, porque cada vez nos cuidamos y apoyamos más todos los hermanos y hermanas trans. Es la única manera de que nos mantengamos a flote y logremos un impacto real en la sociedad.
SHANGAY ⇒ ¿Qué sientes al ver que te has convertido en un referente para muchas personas trans?
TRACE LYSETTE ⇒ Me hace sentir muy orgullosa. Alucino cuando recibo por Instagram mensajes de personas trans desde cualquier lugar del mundo y me cuentan su situación, porque me hace ver más claramente cuánto queda por hacer y lo poderosa que es la visibilidad.