JORJA SMITH – “LOST & FOUND”
(FAMM/SONY MUSIC)
Su fenómeno me recuerda al de Ms. Dynamite en su momento, aunque Jorja Smith llega en un momento muy diferente. Ahora mismo, esta joven revelación británica publica su primer álbum en un momento de absoluta efervescencia del UK soul, con una escena repleta de propuestas interesantes. Lo más llamativo de Smith es que con su humeante voz evoca a la vez a la añorada Amy Winehouse y a la recuperada Lauryn Hill, cuyo genial debut cumple 20 años. Los que tiene Jorja, ahí es nada.
Ya han contado con ella figuras como Drake o Kendrick Lamar, y la crítica de los Brits la ha nombrado artista a la que hay que seguir sí o sí este año. Tras varios singles impecables, lo primero que llama la atención de este debut es que en él ha huido del riesgo; su mayor atrevimiento es firmar un disco que bebe casi exclusivamente de pautas del r’n’b y el soul clásicos. Nada que objetar, porque le sientan como un guante a su cálida voz –ojo, también se atreve con alguna floritura con agudos de esos a los que Mariah Carey ya no llega en el tema que lo titula–. Solo que, una vez escuchado, no resulta lo memorable que quizá hubiera deseado. No es grave, es un primer disco, sutil, envolvente y melancólico, que entra realmente bien.
La tímida aproximación a las bases disco de Where Did I Go? se agradece, y a singles como February 3rd y Blue Lights –sample de Dizzie Rascal incluido– no se les puede poner pegas. Brillante es también The One, producida y coescrita por un compañero de su escena, Joel Compass, con increíbles cuerdas arregladas por Nitin Sawhney. El toque gospel de Tomorrow introduce también variedad en el conjunto, y Smith sale airosa cuando más se acerca a Lauryn Hill, en Lifeboats (Freestyle), otro tema destacado. Bagaje más que positivo para una artista de voz fascinante cuyo material también comienza a serlo. ⭐⭐⭐ 1/2
CHARLIE PUTH – “VOICENOTES»
(WARNER MUSIC)
Parece haberse propuesto demostrar con este segundo álbum que no es una cara bonita sin más, y ha encontrado el camino de la redención –no es el único– a través del funk domesticado y el r’n’b retro. Pues oye, le sienta tan bien que hasta se le perdona que no haya podido resistirse a meter baladas melosas como las que arruinaron su debut. Lo importante es celebrar los temazos que incluye este Voicenotes, como la sensual Attention, la juguetona How Long y la irresistible Done For Me junto a Kelahni. Y ojo, que reconfirma que tiene algo de ‘old soul’ al medirse con Boyz II Men y James Taylor en dúos que deberían haber dado más de sí, pero que está muy bien que aparezcan. Vas bien, Charlie. ⭐⭐⭐
NIÑA DIOZ – “REYNA”
(NACIONAL RECORDS)
Resulta comprensible que haya artistas LGTB que no acaben de entender que se dé antes relevancia a su sexualidad que a su música. Igualmente, resulta loable que la rapera mexicana Niña Dioz dé la vuelta a la tortilla en su tercer álbum, y haga de su orgullo tema central de un disco combativo, ecléctico, inspirado y vibrante. En el que combina hip-hop, trap, r’n’b y música latina melódica, un cóctel que funciona de maravilla. El disco arranca muy alto con Magdalena, en donde lanza consignas tanto en inglés como español que dejan claro de qué va: “queer as fuck, yeah”, “si odias a los gays, mal”… Lo remarcable es que la música está a la altura del discurso, de manera que ha logrado su objetivo: que su arte y su militancia vayan de la mano. ⭐⭐⭐⭐
LEON BRIDGES – “GOOD THING”
(COLUMBIA/SONY)
Qué voz la suya, qué falsete tan bien entrenado y qué expresivo. Y qué bueno que en este segundo álbum haya ampliado miras y no se centre, como en el primero, en un ejercicio de estilo de soul setentero, aunque arranque con Bet Ain’t Worth The Hand, el puente perfecto para esta nueva etapa. La mano de Ricky Reed en la producción ha resultado fundamental para que le veamos brillar en sus acercamientos al funk como en Bad Bad News o al nu soul en Lions. Cuanto más frágil (Forgive You) o sentimental (Georgia To Texas) se muestra, más embauca. ⭐⭐⭐ 1/2
BEATRIZ LUENGO – “CUERPO Y ALMA”
(SONY MUSIC)
Tiene que marcar merecidamente un antes y un después en la carrera de Beatriz Luengo eeste disco, porque es toda una ‘machada’. Ya sabíamos que Luengo tiene mucha alma, y por eso la parte del disco en la que colabora con artistas como Carlos Rivera o Alejandro Sanz sorprende lo justo, porque sabemos que la Bea baladista y romántica es impecable. Lo que hay que celebrar es que la parte que ha denominado Cuerpo es en sí misma un discazo. Qué sorprendente y necesaria resulta esta Luengo bailonga y descarada, que se mide de tú a tú con Mala Rodríguez (Caprichosa), Brisa Fenoy (Amarrao) y Orishas (Sabor, sabor), y sale más que reforzada. Para ‘cuerpazo’, el que se ha marcado Beatriz aquí. ⭐⭐⭐ 1/2
RUSH WEEK – “FEELS”
(ELEFANT RECORDS)
Arranca el disco con la excelsa Feels y no puedes evitar pensar que Ariana Grande mataría por una canción así, un gran ejemplo de cómo combinar una sensibilidad pop actual con un sentimiento de r’n’b noventero que el dúo estadounidense borda. Todo el disco está teñido de una pátina retro que lo hace delicioso, y resulta un ejercicio muy divertido ir descubriendo influencias y guiños. Como el de Crush al Holiday de Madonna. Imposible también no pensar en los Saint Etienne de los inicios, y su ingenuidad disco, en algunos pasajes. Pero ojo, que también puede que te vengan a la mente Tegan and Sara cuando escuches Be Like Mike. Disfrutable de principio a fin para cualquier ‘pop kid’ que se precie. ⭐⭐⭐1/2
TOVE STYRKE – “SWAY”
(SONY MUSIC SWEDEN)
De Swedish Idol a Sway hay un trecho largo, a todos los niveles. Aquí nos sigue pareciendo imposible salir de un talent show y grabar un disco –en realidad un EP– como este, que se antoja toda una obra de madurez, y eso que Styrke tiene solo 25 años. Un brillante despliegue electropopero en donde predominan los ritmos sintéticos y los ambientes gélidos –con la excepción de la ‘perreable’ Change My Mind, con autotune incluido–, que contrastan de maravilla con la cálida –y omnipresente– voz de Tove Styrke, potente hilo conductor de este miniálbum que se cierra con una curiosa versión de Liability de Lorde. Sway crea adicción, y ese es muy buen síntoma. ⭐⭐⭐⭐
RECOPILATORIOS
GARBAGE – “VERSION 2.0”
Pasan las décadas y la admiración por esta banda que brilló especialmente con sus dos primeros discos y su personal visión del rock electrónico no cesa. Su cantante Shirley Manson es un icono en toda regla, y el trabajo de producción de Burch Vig sigue resultando admirable. Version 2.0 cumple 20 años y recibe su remasterización de rigor en una edición especial que, además, recupera diez caras B de la época. Este álbum supuso sin duda una cumbre en su carrera, y singles como I Think I’m Paranoid, Push It y When I Grow Up siguen resultando irresistibles. Si no lo tienes controlado, es un buen momento para sumergirse en un álbum redondo de principio a fin, que marcó un antes y un después, y que permitió a Garbage devorar las listas pop de todo el mundo, más que merecidamente. ⭐⭐⭐⭐
MORENA Y CLARA – “NO LLORES MÁS”
Ahora que la rumba pop vive un nuevo momento estelar gracias a jitazos como Baila conmigo de Soleá Morente, no está de más reivindicar a Morena y Clara. Surgieron a raíz del éxito de Las Grecas, y aquí se recopilan las canciones más resultonas de los álbumes que grabaron en los 70, irresistibles para petardear. Cuando descubras temas como Dejé de quererte o No llores más verás lo reivindicables que son, y no solo por los ‘nonainos’. Porque más allá de las rumbas pop, los toques disco y psicodélicos son de lo más llamativos. No tengas prejuicios y abandónate al salero de Morena y Clara. ⭐⭐⭐