Es uno de los empresarios más conocidos de este país y, año tras año, sale en todas las listas de los gays más influyentes. Pero el presidente de Room Mate Group lleva mucho tiempo luchando por la visibilidad LGTBI. Kike Sarasola empezó a ‘ser visible’ bastante tiempo antes de abrir el primer hotel de la cadena. Y, por supuesto, mucho antes de alcanzar fama mediática por programas como Este hotel es un infierno. El empresario, que asegura que los modelos de familias LGTBI están siendo atacados, es uno de los personajes que forma la bandera del 25 aniversario de Shangay (PUEDES VER LA ESPECTACULAR BANDERA LGTBI DE SHANGAY AQUÍ).
Fue un destacado jinete desde niño, llegó a ser varias veces olímpico y fue el primer deportista de elite en España en salir del armario. Por todos esos motivos es uno de los de los protagonistas de nuestra bandera LGTBI para el número especial de nuestro 25 aniversario.
Quedamos con Kike Sarasola en la redacción de Shangay, donde hablamos de todo lo que ha vivido, luchado, para dar visibilidad a su vida. No en vano es posiblemente el primer gay que ha compartido páginas en las páginas en las revistas del corazón con otras celebrities por hechos como su boda con el canario Carlos Marrero.
Otra de sus luchas es esa: que las familias LGTB sean reconocidas en nuestra sociedad, algo que el empresario ve amenazado en los últimos tiempos. Con eso también hablamos con él. Y de turismo gay, viajes, homofobia en el deporte…
SHANGAY ⇒ Fuiste el primer deportista de élite, olímpico para más señas, en salir del armario…
KIKE SARASOLA ⇒ Sí, fui el primer deportista olímpico español en salir del armario estando en activo.
SHANGAY ⇒ ¿Sigue siendo homófobo el mundo del deporte?
KIKE SARASOLA ⇒ Yo creo que cada vez menos. Gracias a Dios, todos estos años de ‘normalizar’ el tema han servido para mucho. Sobre todo en España, no me refiero a otras partes del mundo donde pueden ser aún muy homófobos, y un horror. Por lo que sé, por amigos que están en activo, hemos avanzado tanto en la sociedad que somos un referente mundial de cómo se deben hacer las cosas. Me siento muy orgulloso de ser español, de ver cómo se ha normalizado este tema en todos los ámbitos.
SHANGAY ⇒ El fútbol sigue siendo el reducto más tremendo, ¿no?
KIKE SARASOLA ⇒ Quiero pensar que no es homófobo, lo que pasa es que nadie ha querido salir del armario. Sí que hay casos en Inglaterra. Es, quizás, el reducto más contrario a decirlo públicamente, pero quiero creer que no es un reducto homófobo. ¡Es que también quiero creer que hoy en día esto es un tema que no es importante en ningún sector!
SHANGAY ⇒ Usas sin parar el verbo ‘normalizar’, que no gusta mucho en el mundo LGTBI, porque en teoría no se puede ‘normalizar’ lo que es ‘normal’…
KIKE SARASOLA ⇒ Sí que me gusta usar ‘normalizar’ porque mi objetivo, por lo que yo he luchado toda la vida, es que un día esto no sea ‘un tema’. Que si te gusta un hombre, una mujer, o te guste lo que te guste, no sea ‘un tema’. Por ello, para mí ‘normalizar’ es el término adecuado. Y ese ha sido mi objetivo toda la vida. Que nadie te pregunte ‘¿y tú?’. Pues tú eres lo que quieras ser, es tu vida, y punto. Nadie tiene ni porqué preguntártelo. Toda la vida he trabajado, y he luchado, para eso. Para que sea un tema ‘normal’, en el sentido de que no haya que decirlo. Y mientras haya gente a la que se le ataque en la calle, existan situaciones de violencia, tenemos que seguir luchando. Pero mi objetivo, insisto, es que esto no sea ‘un tema’ y que no tengamos que defenderlo porque se ya haya ‘normalizado’. Por eso a mí ese verbo, en este contexto, sí me gusta.
SHANGAY ⇒ Aseguras que tu empresa no es LGTBIfriendly, ni siquiera gayfriendly...
KIKE SARASOLA ⇒ Pues no. Es peoplefriendly. Mi objetivo es que estemos tan integrados, que sea tan normal, que no haga falta ni decir que es una empresa friendly de una forma u otra. Por ello Room Mate es peoplefriendly desde que nació. Cuando me preguntan por el tema de integración en mi empresa les contesto que no sé de qué me hablan. Eso no existe: en Room Mate somos personas. Vengas de donde vengas, te guste lo que te guste. Nosotros defendemos la individualidad.
SHANGAY ⇒ Cómo ha cambiado todo en estos primeros veinticinco años de Shangay, ¿verdad?
KIKE SARASOLA ⇒ Mira… ¡Ha sido tan bonito! Es un tema del que podemos estar orgullosos, y somos un referente mundial. Cómo hemos sabido aceptar a la gente, ‘normalizar’… Han sido años que, por supuesto, han tenido sus problemas, altibajos y agresiones, verbales, físicas…. En los que hemos tenido que luchar, pero hemos luchado con la cara bien alta. Lo hemos hecho para que se nos respete. Y, además, pienso que no hay un estereotipo del gay, de la lesbiana o de nadie del colectivo, algo que es muy importante. Creo que los medios de comunicación han hecho, habéis hecho, tanto las revistas como la televisión, un gran apoyo ‘normalizando’ todo tipos de personalidades. Por eso pienso que ahora mismo, entre la gente joven, cada vez menos es un tema del que hablar. Ya no es importante. Lo veo con mis sobrinos y sobrinas. Es muy bonito ver como hemos evolucionado. Yo estoy encantado.
«Me gusta usar el ‘normalizar’ en materia LGTBI porque mi objetivo es que esto no sea ‘un tema’. Toda la vida he luchado para que sea un tema ‘normal’. Por ello, para mí ‘normalizar’ es el término adecuado»
SHANGAY ⇒ ¿Ves posible una involución?
KIKE SARASOLA ⇒ No. Y no la dejaríamos [y repite varias veces ese ‘no, no, no’]. Es lo mismo que ha pasado con el divorcio. Al principio, los que se rasgaban las vestiduras, los que siempre se las rasgan, estaban en contra. Al final, son ellos mismos los que hacen todas las cosas por las que antes se rasgaban las vestiduras. Ya es un tema normal. Yo creo que tendríamos que tener un gran desastre político para que fuéramos a una involución. Es más, creo que es al revés: que los pasos que hemos dado han sido muy fuertes, muy bien dados, muy seguros. Y con mucho respeto. No pienso que sea posible una involución, y nunca lo permitiríamos.
SHANGAY ⇒ Eres muy activo con el tema de las familias LGTBI, ¿crees que corren riesgo?
KIKE SARASOLA ⇒ Sí [responde muy contundente]. Creo que todavía tenemos que seguir reinvindicándolas. Ha sido un problema, y estamos otra vez sufriendo ataques por nuestros tipos de familia. Es algo que me parece increíble hoy en día. Y sí, tememos que defendernos, porque estamos sufriendo ataques.
SHANGAY ⇒ Has posado incluso con tus hijos para reivindicarlo.
KIKE SARASOLA ⇒ Queremos respetar mucho a los niños. Hemos salido con ellos en fotos, pero sin que se les vea la cara. Creemos que ellos tienen derecho a su anonimato hasta que tengan dieciocho años y, en ese momento, elijan. No quiero que me echen en cara un «¿por qué me sacaste en una revista que a mí no me gusta?». Carlos y yo hemos decidido proteger el anonimato de nuestros hijos, y nunca enseñamos sus caras en las fotos.
SHANGAY ⇒ Pero tú has sido un personaje conocido desde pequeño, por tu familia.
KIKE SARASOLA ⇒ A mí no me afectó serlo. Yo si fui un personaje, porque montaba a caballo desde muy pequeño y era parte del equipo olímpico infantil. Y se me conocía por los caballos. Siempre lo he vivido como un tema normal. Carlos, que no lo ha vivido así, pues es más reacio. Por eso hemos llegado al acuerdo de que a los niños los vamos a dejar en el anonimato.
SHANGAY ⇒ Además, eres posiblemente el primer gay que ha compartido páginas de revistas de corazón con las celebrities por temas como tu boda.
KIKE SARASOLA ⇒ ¡Fue la primera boda [gay] que saltó a la prensa! En ese momento estaba todo el mundo haciendo bodas muy pequeñas, entre amigos… Y yo dije, «¡qué coño! ¿Aquí el único que va a hacer una boda por todo lo alto va a ser mi hermano?» ¡Pues no! Entonces decidí hacer como todo el mundo. E invité a mucha gente conocida: políticos, amigos de todos los ámbitos… Pensé que muchos no iban a venir. Pues al final, vinieron todos. Y a los que no invité porque pensé que les iba a poner en una tesitura complicada, y no quería hacerlo, pues se enfadaron. Ahí me di cuenta cómo había cambiado ya la mentalidad. Creo que sí, que la primera boda gay en una revista del corazón fue la mía. Y a partir de ese momento ya no era ‘un tema’. Ya salió la primera boda, y se ‘normalizó’. Por eso las primeras veces son muy importantes, la primera vez que un cura que dice que es gay, o un militar… Es muy importante que vayamos dando pasos. Creo que lo hemos hecho muy bien cada uno. Todos los medios han apoyado, y hemos conseguido mucho. Por eso sería muy triste una involución. Y cuando se nos ataca, tenemos que defendernos.
SHANGAY ⇒ ¿Qué queda por conseguir en el mundo LGTBI?
KIKE SARASOLA ⇒ Respeto. Conseguir que nos respeten, y nosotros respetar. Mientras que haya una sola agresión o algo en contra, tenemos que seguir luchando.
«Siempre he sido muy combativo. Una vez, en Sevilla, bajé tres veces a la recepción de un hotel, pedía cama de matrimonio porque iba con mi marido y me daban habitación con dos camas»
SHANGAY ⇒ Tu vida profesional ahora está centrada en el turismo y en la hostelería. Cómo han cambiado también las cosas en ese campo. Antes ibas con tu novio, o con un ligue, a un hotel convencional y no te deban una cama de matrimonio nunca…
KIKE SARASOLA ⇒ Yo siempre he sido muy combativo en ese tema. Muy reivindicativo. Recuerdo exactamente en el Hotel Colón, en Sevilla, y puedes ponerlo, que tuve que bajar tres veces a recepción porque me dieron por tres veces habitaciones con dos camas, pese a que yo pedía el cambio a una de matrimonio porque había ido con mi marido. Hasta que no me la dieron, no paré. Pero es que soy muy peleón. Y siempre he obligado a que me respeten, igual que yo respeto a los demás.
SHANGAY ⇒ El turismo LGTBI también ha evolucionado…
KIKE SARASOLA ⇒ En el tema de turismo gay creo que nos hemos dejado, y que no lo hemos hecho bien. Que otros países nos han llevado la delantera. Me parece que grandes destinos LGTBI han dejado de lado a los gays, y estos se han ido. Caso de Ibiza. Ahora están intentando recuperarlo, pero ya se han ido a Miconos o, en España, a Torremolinos, que lo está haciendo muy bien en ese sentido. Todos los segmentos hay que cuidarlos. Tuvimos un boom en los años ochenta y noventa, que fue maravilloso. De repente empezó a interesar más otro tipo de turismo, y se nos ha escapado. Ya no somos un destino turístico gay, y deberíamos volver a serlo. Es un tema pendiente que tiene el turismo español.
SHANGAY ⇒ ¿Y cómo lo ves a nivel mundial?
KIKE SARASOLA ⇒ Ha evolucionado muy bien, con mucho respeto a la gente. Y destinos nuevos, que antes no eran destinos gays, están saliendo adelante, cuidándolo y les está yendo muy bien. Y deberíamos mirar en otras ciudades, donde el turismo gay no existía, como, por ejemplo, Tel Aviv. Reflejo de una sociedad que no te mira como gay. Tenemos todo el espectro, es cierto. Y hay gente, como me ocurre a mí, a la que no le gustan los guetos. Pero cuando veo como han evolucionado muchos destinos, creo que en España no lo hemos hecho bien.
SHANGAY ⇒ Tu empresa está en pleno crecimiento…
KIKE SARASOLA ⇒ Estamos en una expansión muy grande. Abrimos cinco hoteles en Roma, tres en París. Ya hemos inaugurado los primeros en ambas ciudades. El de Roma es maravilloso, son veinticuatro apartamentos espectaculares, hechos y decorados por Jean Nouvel. Y, como digo, vamos a estar muy fuertes en Italia. Acabamos de abrir en Róterdam. México también va a ser otro de nuestros destinos potentes. Y en España abrimos otros diez hoteles más: Las Palmas, el tercero de Málaga, quinto y sexto de Madrid, donde recuperamos el famoso Hotel Rex de la Gran Vía. Estamos muy contentos, nos está yendo muy bien y con muchas ganas de crecer…